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lunes, 15 de octubre de 2012

La 'visualización de datos' y Chiqui Esteban
Jornadas de Diseño de la URJC (III)

Imaginad que elaboramos una tabla con un sencillo programa de base de datos, como Excel, o más sencillo aún, con una tablita sencilla en un sencillísimo documento de Google Docs compartido con quienes vayamos a trabajar. Imaginad que en esa tabla creamos varios campos, el primero de ellos, el nombre de jóvenes periodistas españoles; el segundo, su especialidad; sus trabajos el tercer campo, su experiencia laboral, actividad en internet, conferencias... en nuevas tabulaciones sucesivas. Podríamos incluso añadir el grado de información frente a decoración que utilizan como subcampo dentro de la especialidad de periodismo visual.

Imaginemos que con esos datos construimos una infografía, o varias, que mostraran de manera visual quién de ellos es el más interesante; que utilizáramos el código HTML, o el lenguaje que sea, y un sencillo software editor de ese código —el mismo Bloc de notas de Windows, sin ir más lejos—, o algo más completo y habitual como Dreamweaver, para automatizar la infografía y que actualizara su 'aspecto' cada vez que nosotros actualizamos la base de datos —con nuevos trabajos interesantes de cada uno de ellos, por ejemplo—. Podemos imaginar que la infografía imaginada nos mostraría visualmente a Chiqui Esteban como el más destacado de todos ellos. Estamos seguros, para nosotros es así, aunque la 'visualización de datos', que es como llaman a esta manera de hacer periodismo, tan de moda, a veces da sorpresas. Y eso, lo hace más interesante aún.


Chiqui Esteban (izda.) junto al profesor de la URJC Ricardo Roncero, que presentó su conferencia

'Gráficos, deporte y hojas de cálculo' (Chiqui Esteban)

Las IV Jornadas de Diseño de la URJC tuvieron de nuevo como invitado —ya participó en las primeras— al periodista especializado en infografía (es una manera de resumir lo que hace posiblemente muy reduccionista) Chiqui Esteban, actual responsable de los gráficos del medio periodístico digital lainformación.com ("director de nuevas narrativas" es exactamente su cargo y, aunque pueda sonar a excesivamente 'modernístico' lo cierto es que se ajusta bastante a su labor). Le conocimos hace ya unos años compartiendo jornadas en la Universidad de Salamanca cuando era jefe de infografía del desaparecido diario Público. Antes trabajó como responsable de infografía de los diarios del 'Grupo Joly' en Cádiz y, antes del antes, comenzó su andadura profesional en La Voz de Galicia. Además, colabora habitualmente con la consultora Innovations en la que ha realizado trabajos por todo el mundo. Es, además, editor del blog infografistas, referencia absoluta en lo que a infografía se refiere. Aquí podéis consultar una selección que él nos ofrece de sus trabajos. El tema de su conferencia fue, evidentemente, la visualización de datos. 



Leí el clásico de Philip Meyer, 'Periodismo de precisión', a mediados de los 90 del siglo pasado (esto así suena a mucho tiempo, ya). Era parte de las lecturas de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense. Pero llevaba escrito ya más de 20 años, desde 1969-70. De manera resumida, Meyer teorizaba sobre la aplicación de técnicas de investigación social al periodismo: la estadística y las bases de datos, en concreto. Una especie de periodismo científico que manejase muchos datos y en el que la complicación era, y es, tener acceso a grandes bases de datos públicas con información sobre todos los ciudadanos, empresas, economía, etc., a lo que se añadía la enorme dificultad de que no había ordenadores, o más bien que comenzaban a existir entonces para los periodistas. Una vez obtenidos esos datos, se trataba de o bien ofrecérselos al público tal cual o, más interesante si cabe aún, cruzar esos datos para obtener resultados en muchos casos sorprendentes. ¿Cuántos de los muertos menores de determinada edad tenían seguro médico? ¿Y cuántos de ellos son de determinada raza? ¿En qué ciudades sucede más? ¿En qué barrio de tu ciudad?... Sorprendentes porque en muchas ocasiones los resultados obtenidos desafiaban, y desafían, lo que a primera vista sospechamos sobre la realidad.

La visualización de datos, tan de moda ahora, consiste en utilizar esos resultados (accediendo a bases de datos públicas o elaborando nosotros bases de datos más reducidas con determinadas informaciones que nos interesen, porque ahora los ordenadores nos permiten hacerlo de manera muy fácil) para presentarlos visualmente de la manera más eficaz con ayuda de las técnicas de la infografía. Así de sencillo (de describir, no hacer), aunque lo habitual es explicarlo con pseudotecnicismos, palabras complicadas, cuando no inventadas, y todo ello salpicado de anglicismos; es decir, no explicarlo. Lo típico de quien no sabe de qué está hablando o de quien quiere aparentar que sabe más de lo que sabe o, en todo caso, mucho más que quien le pueda leer o escuchar. Todo lo contrario a lo que hace el prestigioso periodista visual Alberto Cairo en esta magnífica entrada sobre la visualización de datos en el blog de El País en el que colabora hablando sobre el "periodismo con futuro".

Uno de los ejemplos que nos puso sobre los resultados sorprendentes de la visualización de datos es este gráfico interactivo que relaciona los presidentes de los clubes de fútbol con los negocios a los que se dedican. Está realizado en flash... pero en proceso de reconversión a HTML. (enlace al gráfico en su página web)


Chiqui Esteban nos mostró visualmente qué es la visualización de datos, organizando su conferencia en cuatro apartados sin un estricto orden, o más bien con un orden recurrente, en el que una vez llegado al último volvía al primero para ilustrar y profundizarlo aún más. Lo primero, para él, es explicar "de una manera distinta a como se explican las noticias con palabras. Una manera más directa y sencilla que cualquiera pueda entender". Después habla de contextualizar "poniendo en relación unos datos con otros"; descubrir, "porque a través de esas relaciones encontramos cosas que en muchos casos no habíamos sospechado", y, por último, sorprender. "Tenemos que hacer las cosas de una manera distinta a como las hacen las grandes cabeceras, que tienen muchos más medios".

¿Cómo hace todo esto este periodista visual? Pues creando en primer lugar una base de datos lo más completa posible en un sencillo documento de Google Docs, o en un documento de Excel. Una tablita en la que todos los que están autorizados a entrar —generalmente los infografistas y los redactores— van introduciendo datos. "De ahí, salen todas las historias". Después se crea una infografía —"antes utilizábamos Flash o Ilustrator"— y se programa para que esa infografía que presentará los datos se alimente de la base de datos conforme se actualiza con más información —"por eso ahora tenemos que utilizar código y usamos Dreamweaver o cualquier editor de código HTML, o Java... pero ¡no pongáis esa cara! Que no es tan difícil; que no, que yo soy un negao para los números y las matemáticas", nos dice entre risas. "El equipo de lainformación.com somos dos, que hemos involucrado a toda la redacción en esto", continúa. "Si no, sería imposible. Además, menos mal que nos hemos pasado al HTML porque el tráfico en tableta está creciendo muchísimo", y sabéis todos que los cacharritos móviles de Apple, iPads e iPhones, no admiten flash.



Chiqui Esteban explicando las características del gráfico que dejó preparado en lainformación.com para los Juegos Olímpicos y que se actualizó automáticamente (programado con HTML) con la introducción de datos por parte de los redactores en un sencillo documento de Google Docs. "Así, me pude ir de vacaciones", confesó


Tecnicismos aparte, para Chiqui Esteban lo más importante son dos cosas: ideas y planificación. "Yo he podido tomarme vacaciones, precisamente durante los Juegos Olímpicos", confiesa, "porque dejé varios gráficos programados de esta manera, y los redactores iban metiendo cada día los nuevos datos:  medallas, deportistas que ganaban, países... y el gráfico se actualizaba sólo".

Ideas, planificación... y, sobre todo, la información. Los datos. "Es menos importante hacer un gráfico bonito", repite Chiqui Esteban cargado de razón desde hace muchos años (en Salamanca nos puso una diapositiva de unas flores, creo, o de un gatito, como muestra de lo que les ofrecía a los redactores cuando le pedían una infografía "bonita"). "El periodismo de datos", por ejemplo, continúa Chiqui, "nos ha permitido saber que hay diputados que cobran ayuda por vivienda aunque vivan en Madrid. El año pasado se hicieron públicos datos sobre los diputados que después se han cruzado".

Ideas, planificación e información. "No hay que pensar en el gráfico, en cómo va a quedar, antes que en la información que se tiene. ES AL REVÉS", insiste. No se trata de "hacer un gráfico con globitos, que queda muy bien y están muy de moda, sin saber qué información tenemos". Porque posiblemente no sea la mejor manera de visualizarla y estemos ya condicionados. Es imposible saber cuál es la mejor manera de visualizar algo... si todavía no sabemos de qué algo estamos hablando, es de perogrullo.

Como "tampoco hay que dar interactividad porque sí, porque sea internet", va un poco más allá Chiqui Esteban. "Consume muchos más recursos de todo tipo, tiempo, de los servidores, de los ordenadores de quienes lo van a ver después... y lo mismo estamos hablando de información que no tiene por qué moverse, o dar saltitos. Hay que utilizar la interactividad con mucho criterio, midiéndolo mucho".

Chiqui Esteban durante el turno de preguntas... que fueron muchas e interesantes.

El turno de preguntas fue realmente muy participativo, con infinidad de cuestiones —alguna de ellas muy técnica sobre códigos y expresiones ininteligibles que el amigo Chiqui sorteó con una envidiable soltura— y la mayoría muy interesantes. Le planteamos la posibilidad de manipulación que puede existir, o no, con este 'nuevo' periodismo que se presenta aparentemente aséptico y científico... a lo que nos responde que "todo depende de la honestidad del periodista. Evidentemente, al elegir unos datos en vez de otros el resultado final puede quedar sesgado. Pero científico, claro que es". Como las estadísticas, claro... Por eso tiene de nuevo razón Chiqui al hablar de la "honestidad" de los periodistas, más necesaria que nunca en esta manera de informar en la que el lector puede estar en desventaja ante la "evidencia" de los datos.

Antes de finalizar tenemos que actualizar, eso sí, la tablita imaginada al comienzo. ¿Recordáis? Porque en el apartado de medios de comunicación en los que desempeñan su labor profesional hay que añadir ahora el que Chiqui Esteban ha sido fichado recientemente, nada más y nada menos, que por The Boston Globe. Por si cabía alguna duda sobre los resultados que la visualización de datos nos iban a ofrecer acerca de los periodistas visuales españoles... que en este caso el periodismo español 'pierde' —como tantos y tantos profesionales de muchísima calidad— mientras que en otros países sí valoran y contratan para intentar hacer mejores productos periodísticos. Enhorabuena y suerte, Chiqui.


Jornadas de Diseño de la URJC (I): 'Marca 360', José Juan Gámez
Jornadas de Diseño de la URJC (II): 'Una historia de la prensa deportiva española', Fermín Vílchez

viernes, 12 de octubre de 2012

Vídeos, vídeos, vídeos

Videoclips, trailers de películas, comerciales, grabaciones desde un teléfono movil, minireportajes... Todos llegan a nuestro móvil, correo electrónico, tableta y nos sorprenden, nos inquietan, nos alegran, nos admiran. E inmediatamente pasan a ser como una de esas antiguas cadenas de las de antes, en las que si no enviabas no sé cuántas cartas a conocidos te caía encima una fatalidad.

YouTube ha pasado a ser el 'canal de televisión' preferido por la mayoría de los jóvenes en los que encuentran el tipo de entretenimiento que ellos quieren. Nadie les programa lo que quieren ver. Supreproducciones con infinitos medios compiten en popularidad con vídeos caseros de gente cantando, bailando o en cualquier actividad que pueda ser grabada. 'Contigo no bicho', 'La he líao parda', 'El zapatazo a Bush', 'La becaria del Intermedio', cámaras de seguridad, Paul Pott, Susan Boyle, Lady Gaga, Wendy Sulca, Justin Bieber y miles más conviven y forman parte de una nueva cultura generacional.

En este espacio iremos mostrando los vídeos que más nos hayan llamado la atención, ya sea por su calidad, contenido, impacto, popularidad o cualquier motivo que nos parezca oportuno.


El vídeo de la semana

Para comenzar esta sección, empezamos con un clásico: el videoclip musical. Atrás quedan los tiempos en los que el único artista que sorprendía visualmente era Michael Jackson con su habitual espectacular derroche de efectos especiales. Ahora, una única persona como Filip Sterckx (web oficial) dirige, edita y anima en 3D un trabajo para el grupo belga 'Willow'.



Utilizando sólo tres proyectores, dos paredes y una banda caminadora consigue crear un universo visual admirable. Sin apenas postproducción, con un presupuesto rídiculo para lo que un videoclip promocional suele costar y con una grandísima interpretación del cantante del grupo, Filip Sterckx utiliza una especie de plano secuencia donde se ve a alguien que anda por la calle mientras trascurre la historia. Últimamente, este recurso lo hemos podido ver en las campañas de la cerveza San Miguel 2011 y en San Miguel 2012 con artistas internacionales, grandes localizaciones y todo lujo de medios o hace unos años en un vídeo del grupo Vetusta Morla con su canción 'Otro día en el mundo'.

Para nostálgicos y como guiño a algún miembro de encajabaja, no podía faltar la escena de Hugh Grant caminando por 'Notting Hill' mientras suena el gran Bill Withers.

lunes, 1 de octubre de 2012

USA Today today (2). Pantallas, ¿de papel?


Cada día que pasa estamos un día más cerca del futuro. Un futuro de pantallas que ya son el presente pero que mientras avanzan miran demasiado hacia el pasado, como esos corredores inseguros que vuelven la cabeza una y otra vez frenando así su esfuerzo... hasta llegar en ocasiones a perder la carrera. Sucede sobre todo en los grandes medios de comunicación, como este gigante USA Today que, no obstante, parece poner todo su empeño en los medios digitales y de ahí la pregunta del prestigioso diseñador periodístico Mario García sobre qué papel tendrá el papel del diario impreso en esta nueva etapa con la que terminábamos el artículo anterior.

Transformarse en una marca —y hay que señalar entonces que según declaraciones de Javier Errea durante su reciente participación en la Cumbre Mundial de Diseño en Prensa 2012, celebrada la semana pasada en México DF, la primera consecuencia de este rediseño integral ha sido, precisamente, que "han destruido una marca tradicional muy bien establecida; es un diseño fallido", tal y como tuiteaba desde allí el infografista Alberto Cairo— digital. Tener como objetivo, pues, convertirse en una marca de medios digitales:


La parte más destacada de su vídeo promocional corresponde, sin ninguna duda, a los medios digitales, tabletas y web, quedan el periódico en un muy segundo plano.

Como para saber a dónde vamos no está nunca de más echar, al menos, un pequeño vistazo a dónde venimos y en dónde estamos, tener perspectiva, enseguida recordé las sabias palabras del periodista, diseñador periodístico y ahora historiador del diseño periodístico Fermín Vílchez (es necesario volver a recordar y recomendar su monumental "Historia Gráfica de la prensa diaria española, 1758-1976", absoluta obra de referencia ya en el diseño periodístico español) en otra reciente conferencia a la que tuve la suerte de acudir en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, titulada precisamente "Presente y futuro del diseño periodístico". Su acertada tesis, compartida además por otros muchos autores y profesionales, es que en lo relativo al diseño periodístico, "los medios digitales miran demasiado al pasado, le deben todavía mucho al papel y no han desarrollado un lenguaje y un diseño propios, algo que tendrán que hacer. Falta creatividad, porque todos siguen pensando como se pensaba en el papel, y no hacen más que imitarse unos a otros".

Se cuestiona Vílchez si esto se debe en parte a condicionantes técnicos porque establece una inteligente comparación entre el actual estado de las webs periodísticas, absolutamente dependientes de informáticos con conocimientos muy especializados, y los primeros periódicos en los que los periodistas necesitaban a profesionales de las artes gráficas con muchos años de experiencia y formación.

Infinita 'home' de la página web de The New York Times, de ayer, 30 de septiembre de 2012.

"Todas las páginas webs de los grandes medios de comunicación parecen diseñadas exactamente igual", analiza Vílchez; "alguna pequeña diferencia tipográfica o de color, muy pequeñas, y luego las tres columnas de rigor; titular, texto y foto como en el papel...". Con el agravante añadido de que como no hay limitaciones de espacio —se acabó el viejo y recurrente problema de que no cabe todo en la portada, y todo lo queremos meter— pues las páginas 'home' se hacen larguísimas, interminables y "desaparece la valoración, la jerarquía, el orden informativo... todo parece meterse según va llegando, sin que prevalezca en muchas ocasiones el criterio periodístico de qué es más importante, qué queremos destacar, por qué apostamos". Además, "al ser todas prácticamente iguales, tampoco logran una seña de identidad con el diseño".




De los grandes medios... y de algunos menos grandes. Precisamente el último lanzamiento de un medio de comunicación digital en España, eldiario.es, dirigido por el conocido periodista Ignacio Escolar —que debe mucha de su bien ganada reputación a su actividad en internet desde hace años— es un claro ejemplo de diseño que mira más al pasado que al futuro, basado por completo en los diarios de papel que, curiosamente, su director declara con motivo de la salida de este su ¿nuevo? medio que "son como los vinilos". Claro que esta mediocridad visual —logo aparte, que me parece acertado e inteligente— también puede deberse a la falta de medios, o a lo que sería más alarmante aún, falta de interés por el diseño o, incluso peor todavía, desconocimiento de que el diseño periodístico es periodismo, y de que la calidad de los contenidos para ser completa requiere una calidad acorde en la forma. Que unos contenidos de calidad mal diseñados se empobrecen y pierden calidad. Que el valor añadido es en parte un diseño eficaz. Que un mensaje periodístico es forma y contenido... Con la sorpresa incorporada de que, además, hablamos de internet, donde los elementos visuales se multiplican ofreciendo posibilidades de diseño periodístico absolutamente desaprovechadas por parte de periodistas supuestamente expertos en internet.  Esperaremos, no obstante, para ver si evolucionan en lo relativo al diseño, y les damos eso sí una merecida enhorabuena por su salida, lo que no es nada fácil en estos tiempos, a la vez que les deseamos toda la suerte en su proyecto.





Si el rediseño del papel del USA Today, digámoslo de una vez, nos parece irrelevante —por muy "infografía viva" y guay que sea su círculo de colores que sube y baja, y se decora, y que suponemos que es uno de los motivos por los que el gran Errea hable de "cargarse su marca"—, en lo relativo a la página web, sin embargo, sí parecen dispuestos a ir un poco más allá que el resto de los grandes medios. Y nótese que hablo siempre, o casi siempre, de grandes medios, porque también coincido con Vílchez en que "el diseño periodístico digital más interesante está en algunos blogs y en medios pequeños" y alternativos. En algunos. Sobre el diseño para iPad del USA Today no tenemos más datos que los que ofrecen a través de su vídeo promocional, en el que parecen apostar mucho por la tableta, pero con un resultado que podríamos llamar, a muy superficial y primera vista, insisto, de "puesta al día". Lo interesante está en la web.

Y volvemos antes de entrar en la web otra vez la vista atrás, porque resulta curioso que los primeros periódicos se compusieran en lo que muchos autores han denominado "maqueta vertical", debido a la tecnología del momento. Según avanzaba esa tecnología de las artes gráficas en los diarios, se pudieron ir introduciendo elementos horizontales. En esos comienzos todo eran columnas, sólo columnas, e incluso los títulos estaban dentro de ellas sin la posibilidad de que abarcasen varias como hacemos ahora. Todo se componía de arriba a abajo. Curioso, porque posiblemente por motivos técnicos del todo distintos, también las páginas webs comenzaron siendo una infinita columna vertical a la que después se han ido añadiendo elementos horizontales.

Primer número del periódico barcelonés La Vanguardia, 7 de abril de 1894, donde se puede ver con toda claridad la denominada 'maquetación vertical' en la que todos los elementos, títulos incluidos, estaban en el interior de las columnas, sin la posiblidad de que, por motivos técnicos, ningún elemento ocupase más de una.

Cuando preparaba su mencionada conferencia, Fermín Vílchez me consultó a través del correo electrónico sobre si había condicionantes técnicos que obligasen a que todas las páginas webs informativas tuviesen tres columnas. Le dije que no, que tal vez existía el consenso no escrito de que es la mejor manera de dividir una pantalla. Pero a la vez le di mi opinión, que evidentemente no es ni novedosa ni exclusiva, de que la mejor manera de aprovechar una pantalla no es dividiéndola en columnas, como sí lo es en el papel, sino estableciendo bloques de manera horizontal, módulos horizontales.







Diversas posibilidades para organizar la información utilizando el mencionado 'diseño horizontal'. Con un tema principal (recuadro azul) y varios temas secundarios por debajo de distinas secciones (identificados por colores, utilizando a modo de ejemplo los del USA Today); desarrollando modularmente el tema principal de modo vertical; y con un único tema principal que puede, además, estar acompañado de subtemas para complementarlo.

¿Por qué? ¿Porque queda más bonito? NO. Porque queda más bonito NO. Sencillamente porque es más sencillo y directo. Se consigue mayor valoración, orden y se puede apostar de manera contundente por un número manejable de temas. O por tres, solamente. O dos. O uno. Son pantallas dentro de tu pantalla que, sin el infinito y frustrante 'scroll', te llevan al 'interior' de secciones que pueden organizarse de la misma manera, o llevarte directamente a artículos en los que sí habrá una columna de texto, una, o a una galería de imágenes, o a contenido multimedia... Sencillo y directo, funcional, como se exige que sea el diseño. Puede hacerse tan atractivo como el talento lo permita, seguramente más que con el modelo vertical, sobre todo para conseguir esa necesaria identidad visual con ayuda de estructuras inteligentes, la tipografía y el color.




Página principal ('home'), de apertura de sección ('Sports'), artículo con un vídeo y artículo sencillo de texto de la nueva web del USA Today.

Y es en esta dirección, precisamente, por la que parecen apostar en la nueva web del USA Today. Además, le añaden a los lados dos barras verticales con información económica útil a la izquierda y una más amplia a la derecha denominada "Right now" con actualizaciones de ultima hora, al minuto, y formato "tuitero". Se aprovecha el sistema identificativo de colores asociados a secciones del periódico (que no 'inventaron' en su diseño original del papel sino que tomaron posteriormente de diseños europeos, como bien nos recuerda Carlos Pérez de Rozas).

Las flechas situadas a izquierda y derecha de la página web del USA Today permiten navegar 'pasando' páginas a la manera de un iPad.

La característica más novedosa de su nueva página web es posiblemente la más discutible: esa navegación 'tabletera' con flechas a la izquierda y derecha para ir 'pasando' páginas a la manera de un iPad, ¿es necesaria en un ordenador? ¿Qué aporta? ¿Hay que 'imitar' a un iPad en un soporte que no es un iPad para tener éxito? La horizontalidad permite todo lo que hemos analizado anteriormente, pero no encuentro ninguna ventaja en este excesivo horizontalismo al que, además, habría que acostumbrarse. En la pantalla de un ordenador parece más coherente estructurar la información horizontalmente y navegar por ella hacia dentro, entrando en cada módulo y no desplazándonos hacia los lados como si estuviéramos en una pantalla táctil.

Claro que aunque hayan dado un importante paso tampoco se puede decir que sean revolucionarios entre los grandes medios en este tipo de estructuras horizontales (que ellos mismos y otros diseñadores asocian a las tabletas, pero que a mí me parecen el mejor sistema para cualquier pantalla, web incluida). Hace ya unos dos años existe una aplicación que hizo Google para The New York Times, que organiza con una estructura horizontal la página web del periódico —aunque, eso sí, como posibilidad opcional manteniendo su página web igual y no como este nuevo USA Today que se arriesga con su propuesta sin alternativas, apostando directamente por ella—, puede descargarse gratuitamente como un complemento para Chrome, y que hace exactamente esto:

 
 






También la última red social de éxito, Pinterest, es además de enteramente visual, horizontal:



Como horizontal es el diseño de la web de la empresa encargada del rediseño del USA Today del que estamos hablando, Wolff Olins, aunque con una estructura de 'aparente' caos de modernidad y dinamismo:



Hace 30 años, el USA Today arriesgó medios económicos y talento con una propuesta revolucionaria que cambió en mayor o menor medida a todos los periódicos del mundo. Ahora intentan adaptarse a los cambios que les llegan desde fuera y nos ofrecen algo que no es ni mucho menos lo que nos deslumbró cuando salieron al mercado en 1982. Nada nuevo, no es —tampoco lo esperábamos— ese nuevo modelo que todos buscamos, algunos aguardándolo sentados, posiblemente en vano porque lo más probable es que un mismo modelo para todos no exista, y cada uno tengamos que encontrar el nuestro.


USA Today today (1). El papel del papel

miércoles, 8 de febrero de 2012

Presente y futuro del diseño periodístico

Un privilegio, el que hemos tenido esta mañana en la Universidad Rey Juan Carlos del sur de Madrid, al asisitir a la conferencia del maestro Fermín Vílchez, autor de esa obra de referencia sobre la historia del Diseño periodístico español de la que os dimos noticia un poco antes de que saliera al mercado y cuya primera edición está ya agotada (tranquilidad porque está en imprenta la segunda edición), conferencia titulada "Presente y futuro del diseño periodístico". Y otro privilegio más, el que hemos disfrutado después durante la comida junto a otros profesionales y académicos del diseño periodísitico y la tipografía (entre los que estaban Paco Martín, pionero de los estudios universitarios sobre diseño periodístico en la Complutense; Laura González, profesora de diseño periodístico en el CEU y muy querida amiga de encajabaja, Herminio J. Fernández, jefe de diseño del diario Público y coeditor del gran blog amigo y vecino Cuatro Tipos; o Roberto Gamonal, miembro de Unos Tipos Duros, página web de absoluta referencia en lengua castellana en lo relativo a la tipografía, lo mejor de lo mejor), todos y alguno más oyéndole contar sus divertidísimas e inagotables anécdotas sobre los periódicos. Aprender y reír, eso es estar con Fermín Vílchez.

Fermín Vílchez y Pedro Pérez, organizador del acto, al comienzo de la conferencia


El salón de actos estaba abarrotado, incluso con asistentes sentados en el suelo. En primer plano, la profesora de diseño periodístico del CEU, Laura González


El acto de hoy estaba organizado por Pedro Pérez Cuadrado, mi maestro como ya he comentado cada vez que he tenido ocasión de hacerlo, profesional en incontables periódicos (le conocí no en un aula sino en uno de ellos, pero eso también lo he contado ya...) y profesor ahora en esta Universidad, y aunque pudiera parece que Vílchez acudía para "hablar de su libro" —cosa que tampoco habría estado nada mal, porque el libro es tan inagotable como el propio autor— lo cierto es que no ha sido así, y el maestro de diseñadores ha hablado de... ¡diseño periodístico! Cómo lo ve ahora, cómo es su estado actual, y cómo debería ser según su punto de vista, muy argumentado.

Para Vílchez, que ha trabajado en los principales periódicos de nuestro país, tanto en Madrid como en Barcelona, algo que no suele ser frecuente (La Vanguardia y El Periódico, o como fundador nada más y nada menos que de El País, participando en ese diseño original que creó escuela junto al alemán Reinhard Gäde —a quien desde aquí mandamos un cariñoso saludo y mucho ánimo y fuerza— y al fallecido Julio Alonso), "el diseño ha cambiado en todos los periódicos, en varias ocasiones en muchos de ellos, pero los contenidos siguen siendo exactamente los mismos. Han quedado obsoletos", y eso, junto a la llegada de internet, es "la causa de su declive. A pesar de de los continuos rediseños gráficos, tanto en España como en el extranjero, las ventas de los diarios siguen bajando".

Vílchez muestra en gráficos la continua caída en difusión de los periódicos


Antes de llegar a este contundente punto de vista, ha explicado brevemente los orígenes y evolución del diseño periodístico, de vital importancia ahora gracias, precisamente, a los continuos avances tecnológicos. "Las secciones de diseño, junto a la Mesa de redacción, son centros vitales en las redacciones de los periódicos", desde que se informatizó el proceso de producción. "Ahora, incluso las planchas de impresión salen directamente desde un ordenador", nos ha explicado, "y existen estudios y empresas dedicados al diseño de periódicos en todo el mundo".

Este proceso de informatización supuso para el diseño periodístico una mejora en la diagramación, "cuando adoptó el diseño modular que proporciona mayor legibilidad y orden en las páginas"; tipografías accesibles en cantidad y calidad a un menor precio; y la posibilidad de la cuatricomía, imprimir a todo color todas las páginas de un diario. "Pero los contenidos no han evolucionado", explica Fermín Vílchez, e incluso señala una cierta uniformidad de todos los diseños, "todos los periódicos tienen el mismo formato, tabloide, casi con la misma retícula, todos son en color... tan sólo se diferencian en cuanto a la tipografía. Algo que sólo puede apreciar un profesional, pero no un lector corriente". Para Vílchez "no ha aparecido ningún diario que cree una tendencia nueva, un nuevo modelo de diseño, desde la aparición en España del diario El País, en 1976, o del USA Today en Estados Unidos en 1982".



Ejemplos de uniformidad en el diseño de los diarios de papel...


Y a continuación ha citado al mencionado Julio Alonso, maestro a su vez de Vílchez como él mismo ha manifestado, quien en 2008 señalaba que "lo que exigen estos tiempos más que rediseñar los periódicos, es reinventarlos". Hacer algo nuevo. Y eso nuevo, para Vílchez, tiene que estar en el mundo digital. Porque mientras las tiradas y las ventas del papel siguen bajando "el avance del diario digital es espectacular. Los rediseños, ahora mismo, basados en el tradicional periódico de papel, no sirven para nada que no sea para dar de comer a algunos consultores", afirma con rotundidad.

Pero sucede que, para Fermín Vílchez, el actual diseño y estructura de los diarios digitales es equivocado. "Son todos iguales y todos siguen con la mentalidad del diseño periodístico en papel (...) todos tienen tres bloques, tres columnas en sus portadas, que pasan a dos columnas cuando pinchas en cada una de las noticias... ¿Por qué? No encuentro demasiados diseñadores que investiguen en nuevos formatos digitales. Falta creatividad, porque todos siguen pensando como se pensaba en el papel, y no hacen más que imitarse unos a otros". Vílchez ha puesto ejemplos de cómo, según su punto de vista, no deben diseñarse las portadas de los diarios digitales. Páginas interminables, "que llenar con demasiados elementos, en las que quieren meter todo, todo, todo, ¡que no se acaban!", y en las que, por tanto, "no hay valoración", no hay noticias más importantes que otras, y sólo las últimas que llegan van sustituyendo a las anteriores. "Las portadas de los digitales deberían hacer una selección", en vez de abrumar al lector con cantidad, en vez de con calidad.


...y ejemplos de uniformidad en el diseño de los diarios digitales


"Los blogs, y no el papel, deben inspirar más el futuro diseño periodístico —que será digital— que los periódicos en papel", afirma el autor de la historia del diseño de la prensa española. "Sucede como en el comienzo de los diarios, hace unos tres siglos. Entonces inventaron el diseño periodístico en pequeños medios que hacía una sola persona, o muy pocas, con muy pocos medios, creando lo que hasta entonces no había... como suecede en el caso de muchos de los blogs que hay ahora, y en los que encuentro ideas y propuestas que sí pueden servir para un diseño periodístico del futuro... aunque, claro, es un punto de vista humilde porque no soy un experto en el mundo digital".

"Si las predicciones se cumplen", ha terminado Fermín Vilchez en sus conclusiones, "es cierto que el diseño periodístico en papel puede tener los días contados. Así que los periodistas diseñadores tienen que pensar en el mundo digital. Y además, creo que mientras coexistan ambos medios debe diseñarse primero el periódico digital, sin copiar al de papel, prestando atención a la actualidad inmediata y haciendo una selección en la que no quepa todo; y después diseñar el papel reinventándolo de nuevo para centrarlo en el análisis, la opinión y las noticias propias".



A pesar de su mensaje un tanto pesimista y algo apocalíptico, que el propio Vílchez me confiesa después que posiblemente sea algo exagerado pero necesario para intentar concienciar y que haya un revulsivo en la prensa, "la función que lleva haciendo la prensa diaria desde hace tres siglos seguirá existiendo. A pesar de los nuevos medios, en los que cualquiera no puede ser periodista, no nos confundamos, a pesar de la posible desaparición del papel... el periódico sobrevivirá en la versión y en el formato que sea, siempre que se fundamente en los valores de la libertad de expresión, en dar un servicio a los ciudadanos, en la calidad, el rigor y, sobre todo, en la veracidad. Y los diseñadores no deben tener miedo al futuro porque siempre, siempre, será necesario que alguien dé forma a la información, siempre será necesario que alguien diseñe ese periódico del futuro".

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Del papel a internet
#jornadasdiseño(3)

Esta nueva entrega sobre las Jornadas de Diseño de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, celebradas la pasada semana, corresponde a la segunda jornada con las ponencias sobre la evolución de las revistas hacia los soportes digitales y sobre la plataforma de Orbyt para distribuir de manera digital el diario El Mundo.



"La evolución hacia la revista online" (Javier Moya)

El navarro Javier Moya (@javiermoya en Tuiter) es el entusiasta y apasionado director de Internet en Spainmedia Magazines (Esquire, Harper's Bazaar y Robb Report), experto en el desarrollo de interfaces, coordinación de proyectos online y, en definitiva, al servicio de Internet desde 1999.



Nos puso como ejemplo las revistas Harper's Bazaar y Esquire para mostrarnos cómo habían evolucionado desde su edición en papel hasta su soporte digital. Manteniendo las líneas principales del diseño de estas revistas, sus gemelas en la red han apostado por un diseño modular con una cuidadísima edición fotografica y un uso de familias y cuerpos de letra que personalizan las diferentes secciones.



Su experiencia en el sector le ha llevado a comprobar que "las revistas digitales no cuentan con la misma cantidad de medios ni de inversión económica que las impresas" pero una de los aspectos que a Javier Moya le parece fundamental es la falta de un director de arte. Alguien que sirva de parapeto ante injerencias internas o externas ("cualquiera te puede decir qué es 'bonito' y qué no lo es") y de avance a la hora de acometer nuevos proyectos.

El creciente uso del vídeo como nueva herramienta y la involucración del lector en los juegos propuestos, encuestas, envío de fotos, comentarios y usos de las redes sociales fueron las últimas reflexiones del ponente que nos conminó a todos a trabajar "sin olvidar nunca divertirse".

Os ofrecemos en enlace con la presentación de Javier Moya en las III Jornadas de Diseño de la Universidad Rey Juan Carlos de Fuenlabrada.



El Mundo en Orbyt y la edición de sus vídeos (Alberto D. Prieto y Quique Falcón)

"Con internet se acabó la fiesta... pero empezó una nueva", comenzó su intervención Alberto D. Prieto, jefe de sección de El Mundo en Orbyt para explicarnos en qué consiste esta nueva plataforma para distribuir el periódico y "llevarlo hasta los lectores" con una propuesta "enriquecida". Y es que "se dice que lo estropea la tecnología, lo arregla la tecnología".



Prieto explicó que los actuales periódicos en papel están atravesando por una "triple crisis". En primer lugar la omnipresente y omnimencionada crisis económica general, a la que hay que sumar la caída de lectores y publicidad por la crisis del modelo en la prensa escrita, "hoy es un héroe quien se acerca hasta un quiosco para comprar un periódico", y que según algunos cálculos podría "empezar a salir del túnel hacia 2016". A estas dos hay que sumar una tercera que él denominó "crisis de credibilidad" en la que "el ruido es el mayor enemigo de la información. No importa lo importante, sino lo último, lo urgente...".

La propuesta de Orbyt, explicó su responsable, es la de ofrecer "jerarquía y análisis, lo que es un periódico. Algo que es un valor añadido a la mera información. Una visión propia de la realidad, con su diseño y su infografía". Y como España no es precisamente un país de lectores de periódicos, "¿qué podemos hacer?, pues ir a buscarlos donde estén. Te doy TU periódico, más barato y te lo llevo hasta tu casa, hasta tu ordenador, hasta tu teléfono... y te añado vídeos de elaboración propia. Orbyt no es más que el periódico de siempre", sintentizó Prieto, "pero es mucho más".

Mucho más porque esta plataforma "nos permite hacer números especiales y publicarlos en menos tiempo que el periódico de papel", como fue el caso de la muerte de Bin Laden ("la primera vez que se hizo algo así en un medio, que tengamos noticia").



Nuestro encajabaja Quique Falcón, anterior maqueta reconvertido en editor de vídeos para esta nueva plataforma de El Mundo, comenzó su conferencia ante un auidotorio completamente lleno de alumnos y de profesionales de la prensa explicándonos cómo era un periódico cuando comenzó a trabajar hace unos 25 años. "Entonces hacíamos páginas que no se veían hasta que no salían de la firlmadora utilizando para ello la fotocomposición... fue la primera gran revolución de los periódicos".

"Internet fue la siguiente revolución. Pero el primero que nos explicó aquello, no hace tanto, no se podía ni siquiera imaginar lo que es ahora". Quique Falcón ve "una luz de esperanza" en las actuales redacciones multimedia "en las que estamos aunando experiencia y juventud. Desaparecen unos oficios, como ya sucedió como os he comentado al principio en mis inicios, pero surgen otros, y todos vosotros tenéis nuevas oportunidades en ellos".

Quique Falcón, Alberto D. Prieto y el profesor de la URJC Pablo Prieto.

Interesante y aleccionador resultó el relato de una jornada que glosó con sentido del humor nuestro encajabaja especialista en vídeos, así como el vídeo final que resume en pocos minutos su trabajo en Orbyt durante casi ya dos años y que por supuesto os ofreceremos. Ya desde su casa antes de salir hacia el periódico recreaba mentalmente posibles imágenes sobre la muerte de Gadafi en este "día de trabajo". Al llegar planificó junto a Alberto Prieto y toda la sección de Orbyt el número de vídeos que había que hacer ("muchos, claro") y cuando estaba todo encauzado y parte del trabajo elaborado... ETA anuncia en un comunicado el "cese definitivo de la violencia". Periodismo.

Luis Blasco 'tuiteando' las Jornadas con un portátil y un iPhone (para tuitear con imágenes) desde nuestra cuenta de Tuiter (@encajabajablog) con la etiqueta #jornadasdiseno, y a la vez tomando fotografías y vídeos... el periodista multimedia.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Modelo ¿único?

Es una sala de espera, de la que poco a poco va saliendo alguno para no volver, y en la que fumamos esperando. Desesperamos esperando ese "modelo único", la flauta que suene para seguir todos los demás al flautisa que al final nos salve... pero lo que llega es un cartel de prohibido fumar y la recomendación de que o nos movemos un poco o nos va a dar un infarto de tanto estar en el sillón, sentados, fumando, quietos, esperando.

No tardó mucho, comenzó a su hora la conferencia del profesor Fabrizio Pini, del Instituto Politécnico de Milán, a la que asistimos hace unos meses en esa ciudad del norte de Italia en un día desapacible y muy frío, sobre distintos modelos de medios de comunicación. Analizó con brevedad, concisión y claridad —¿recuerda alguien aquello?— dos propuestas tan distintas como The Daily de Rupert Murdoch, "un medio cerrado que sólo se distribuye a través de un canal"; frente a lo que denominan newsbrand (marca de calidad sobre contenidos informativos, podría ser una traducción aproximada) noruega del Aftenposten, "que te acompaña durante todo el día a lo largo de distintos productos", periódico impreso, productos para el iPad, para la web, para móviles... "unos de pago, otros financiados con publicidad, de manera que en realidad ningún contenido es gratuito".




Aunque el profesor Pini no manifestara de manera directa cuál de esas dos propuestas tan opuestas le parece más acertada, "si yo supiera qué va a pasar, o cuál es el modelo de negocio para la prensa... créanme, no estaría aquí ahora hablando con ustedes", su manera de exponer mostraba su preferencia implícita por el modelo que "potencia una marca sin renunciar a ninguna de sus posibilidades, haciendo que se refuercen unas a otras. Para ello hay que diseñar lo nuevo en función de lo nuevo y no a partir de lo viejo".



Esperamos un poco, y aquel mismo día por la tarde en Milán pudimos escuchar a Andrea Monti, director de La Gazzetta dello Sport, uno de los periódicos deportivos más importantes del mundo, que también ha configurado su "modelo de negocio", de enorme éxito empresarial hasta ahora, como una newsbrand. Monti, un periodista de los que merece la pena escuchar, de lo primero que nos habló, con revencia y una voz grave y casi tan poderosa como el diario que dirige, fue de sus maestros (inaudito, ¿verdad?, acostumbrados como estamos en esta España nuestra a oír a tanto experto, y triunfador hablar sólo de sí mismo).

Y habló de su página web, claro, y de la aplicación para iPad, y de la tienda online, y de Gazzetta TV, y de los eventos que organiza La Gazzetta —Giro de Italia, incluido—... de todo ese universo de 360º como lo llaman los gurúes, pero incidiendo muy especialmente en su punto central, el diario en papel. "Habrán escuchado hablar de último ejemplar impreso de The New York Times, ¿verdad?", nos dijo no en volumen sino en tono de bajo y con una media sonrisa; "pues cada vez que lo oigo recuerdo la nota que envió Mark Twain a un periódico que había publicado su muerte en la que les decía, tan sólo, que aquello le resultaba 'un poco exagerado'". Porque para Monti, el periódico "es el elemento que nos da fuerza y credibilidad de marca (...), lo que da sentido y razón de ser a todo lo demás. Es lo que somos".


Me pongo malísimo en el avión. Después de esperar más de una hora en el control de seguridad y de correr por una terminal que nunca terminaba, horripilante y caótica, el avión tarda más de dos horas en salir y en la sala de espera tan sólo de te dicen que esperes. Despegamos por fin y el piloto decide volar muy rápido para recuperar el tiempo perdido, pero al llegar a Barajas no tiene pista para aterrizar y tenemos que esperar en el aire, dando vueltas... que si las capas de la atmósfera y las turbulencias, que si la presión me destroza los oídos y a nadie más parece afectarle, el asiento de delante tan pegado parece acercárseme cada vez más y me asfixio, paren esto que yo me bajo... vuelvo a ponerme malo de sólo recordarlo.

Leíamos El Mundo en la aplicación de Orbyt para el Ipad en el catastrófico aeropuerto de Malpensa, eso sí. Otra posibilidad, otro modelo. Que se beneficia en este caso de una escuela de diseño periodístico que lleva evolucionando desde que nacieron los periódicos, estructurando la realidad que queremos contar con orden y jerarquía a la vez que se confiere de identidad a las páginas, porque son las páginas del periódico las que se ofrecen en este quiosco virtual.



Páginas "enriquecidas" con contenidos adicionales imposibles en el papel como es el caso de los vídeos; y con la posibilidad de lanzar también ediciones especiales del periódico ante acontecimientos extraordinarios, como hicimos en el caso de la muerte de Bin Laden, el 2 de mayo de 2011, la primera vez que se ha hecho algo así en la prensa, que nosotros sepamos. Los enormes costes de impresión y distribución disminuyen con esta manera de publicar posibilitando así un precio menor del periódico, sí se trata del periódico, a los lectores.



Dicho así podría parecer que se trata DEL modelo... pero es en realidad UN modelo. Que cuando intenta tan sólo imitarse ofrece como resultados siempre algo peor. Y no es por que se trate de nuestra competencia, que también, pero comparar las páginas sin ningún contenido añadido (ni vídeo, ni nada) de Kyoskoymas, el "quiosco digital" de Prisa en el que ofrece El País junto a otras muchas publicaciones, ¡cortadas por debajo! porque no dan la proporción adecuada en la pantalla de un iPad, todo ello en una interface ciertamente pobre, muestra claramente que EL modelo, o UN modelo, o CUALQUIER modelo, necesita como requisito primero y fundamental... creer en él.

El mencionado director de La Gazzetta nos señaló las enormes diferencias que podían tener en su desarrollo nuestros periódicos y sus periódicos italianos en internet... por el mero hecho del idioma. "El italiano no se habla más allá de nuestra península... mientras que el español de ustedes se habla en todo el mundo. Tienen que aprovechar esta circunstancia". ¿Cómo vamos a tener entonces el mismo modelo? ¿Y cómo, a su vez, vamos a tener nosotros el mismo modelo que los medios en inglés?, que también se habla en todo el mundo pero cuyas gentes y sociedades se parecen bien poco a las "nuestras".

Manuel Castells menciona como características comunes a los medios de comunicación en nuestra sociedad actual, que él denomina "sociedad red", la "globalización", pero a la vez el "carácter local". Una combinación adecuada que aflore de esta dialéctica global/local es lógico pensar que sea única para cada uno de los medios, lo que llevaría a descartar un modelo único. Existen características comunes que deben tener los medios de comunicación que quieran sobrevivir, independientemente del "modelo de negocio" de cada una de ellos, como bien nos explica el profesor Ramón Salaverría, director de Proyectos Periodísticos en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra, a quien siempre conviene leer: "El papel de los periodistas como interpretadores de la realidad es algo que sigue siendo plenamente vigente, y ahora más que nunca. Ante tal polución informativa, si no disponemos de profesionales que nos sepan explicar qué está pasando día a día, minuto a minuto, en muchas casos nos podemos sentir desorientados", nos dice; y añade: "Tendrán éxito los que aporten originalidad". Los que ofrezcan un valor añadido.




Die Zeit, semanario alemán que triunfa a contracorriente, uno de los pocos productos en papel —junto a The Economist— que a presar de crisis generales y particulares crece, lo hace utilizando una fórmula curiosa. Su director, Giovanni di Lorenzo, declaró en una entrevista que os enlazamos en su momento que encargaron a varios consultores qué estrategias seguir de cara al futuro y una vez con los resultados en la mano... hicieron exactamente lo contrario. Más texto, más profundo, artículos de fondo, más lectura en definitiva a pesar de que nos vengan diciendo desde hace años que los textos deben ser más pequeños y las imágenes más grandes. Pero ¿no son los periódicos un producto destinado específicamente para lectores?, nos recordaba con ironía e inteligencia el periodista Enric González en otra entrevista que no tiene ni una palabra de desperdicio. Y ese modelo de más lectura que parece funcionar en Alemania o en Inglaterra... ¿serviría en España? ¿Tienen algo que ver sus índices de lectura, a lo largo de la historia, con los nuestros? ¿Es EL modelo, o es SU modelo? Porque si ahora se trata de buscar el famoso nicho de lectores (300.000 ejemplares de un periódico en nuestro país, que supera los 45 millones de habitantes, es un éxito absoluto), hacer un producto dirigido a una elite, lo cierto es que en España no hacemos otra cosa desde... que existen los diarios, los libros, los manuscritos y hasta las pinturas rupestres.

Encontramos incluso casos como el de The Guardian en el que EL modelo goza de un mayor consenso: periodismo de calidad, posiblemente el mejor diseño periodístico del mundo, una web de acceso gratuito en el mejor idioma para lograr millones de visitas de todos los países del planeta... Parecen hacerlo todo bien... y sufren pérdidas que crecen de año en año superando los 40 millones de euros en su último ejercicio. Tal vez aquí suceda lo contrario y EL modelo, el que parece ser mejor para todos, lo sea para todos pero no para ellos, no sea SU modelo. Aunque no se quedaron esperando, sentados, quietos... y eso sí que sea un modelo a seguir.

Levantémonos entonces de la sala de espera, aunque resulte imposible siquiera no ya saber qué viviremos en el futuro sino conocer y vivir el presente, o saber lo que somos, como parece insinuarnos Pedro G. Cuartango, maestro de lo que podríamos llamar periodismo filosófico. Antes de que nos llamen por la única puerta del modelo único por la que vemos pasar de vez en cuando a uno de nosotros camino del fin del camino.