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miércoles, 6 de febrero de 2013

Jornada de diseño periodístico en la red

El Grupo de Investigación en Periodismo del Departamento de Comunicación de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona nos ha enviado información sobre un más que interesante evento que organiza el proximo 21 de febrero con el título: "Jornada de diseño periodístico en la red. Innovación, tendencias y retos de futuro". El objetivo es "dar a conocer las iniciativas y planteamientos innovadores que se están desarrollando y debatir sobre las tendencias de futuro en este ámbito". Una parte importante del evento se centrará en la renovación del diseño web del periódico norteamericano BostonGlobe.com mediante la tecnología Responsive Design, que el año 2011 obtuvo el premio 'World Best Designed Website’, otorgado por la Society for News Design (SND).



Los ponentes son de muchísimo nivel, ya que participan Javier Errea (director del capítulo español de la SND y jefe del estudio Errea Comunicación), Dani Gimeno y David Sancha (Cases i Associats), Tito Bottitta (User Experience director y fundador del estudio Upstatement de Boston), Dan Zedek (director de diseño del BostonGlobe.com) y dos ponentes que explicaran sus experiencias de diseño de medios de ámbito local, Marc Sureda (CanalAjuntament.cat) y David Guerrero (Viumolinsderei.com).

Por si fuera poco, la inscripción es gratuita. Hay que confirmar la asistencia, eso sí, poniéndose en contacto con Maria Alba Valls (recerca.dcom@upf.edu) y especificando en el momento de la confirmación si se requerirá o no certificado de asistencia. Os adjuntamos el pdf con toda la información, horarios y el programa completo.
 
A todos aquellos que estén interesados en el diseño periodístico y puedan acudir, tenemos que aconsejarles que no dejen pasar una oportunidad así, porque esta Jornada de la Pompeu Fabra tiene tan buena pinta que lo único que lamentamos es no poder acudir nosotros.
 

lunes, 15 de octubre de 2012

La 'visualización de datos' y Chiqui Esteban
Jornadas de Diseño de la URJC (III)

Imaginad que elaboramos una tabla con un sencillo programa de base de datos, como Excel, o más sencillo aún, con una tablita sencilla en un sencillísimo documento de Google Docs compartido con quienes vayamos a trabajar. Imaginad que en esa tabla creamos varios campos, el primero de ellos, el nombre de jóvenes periodistas españoles; el segundo, su especialidad; sus trabajos el tercer campo, su experiencia laboral, actividad en internet, conferencias... en nuevas tabulaciones sucesivas. Podríamos incluso añadir el grado de información frente a decoración que utilizan como subcampo dentro de la especialidad de periodismo visual.

Imaginemos que con esos datos construimos una infografía, o varias, que mostraran de manera visual quién de ellos es el más interesante; que utilizáramos el código HTML, o el lenguaje que sea, y un sencillo software editor de ese código —el mismo Bloc de notas de Windows, sin ir más lejos—, o algo más completo y habitual como Dreamweaver, para automatizar la infografía y que actualizara su 'aspecto' cada vez que nosotros actualizamos la base de datos —con nuevos trabajos interesantes de cada uno de ellos, por ejemplo—. Podemos imaginar que la infografía imaginada nos mostraría visualmente a Chiqui Esteban como el más destacado de todos ellos. Estamos seguros, para nosotros es así, aunque la 'visualización de datos', que es como llaman a esta manera de hacer periodismo, tan de moda, a veces da sorpresas. Y eso, lo hace más interesante aún.


Chiqui Esteban (izda.) junto al profesor de la URJC Ricardo Roncero, que presentó su conferencia

'Gráficos, deporte y hojas de cálculo' (Chiqui Esteban)

Las IV Jornadas de Diseño de la URJC tuvieron de nuevo como invitado —ya participó en las primeras— al periodista especializado en infografía (es una manera de resumir lo que hace posiblemente muy reduccionista) Chiqui Esteban, actual responsable de los gráficos del medio periodístico digital lainformación.com ("director de nuevas narrativas" es exactamente su cargo y, aunque pueda sonar a excesivamente 'modernístico' lo cierto es que se ajusta bastante a su labor). Le conocimos hace ya unos años compartiendo jornadas en la Universidad de Salamanca cuando era jefe de infografía del desaparecido diario Público. Antes trabajó como responsable de infografía de los diarios del 'Grupo Joly' en Cádiz y, antes del antes, comenzó su andadura profesional en La Voz de Galicia. Además, colabora habitualmente con la consultora Innovations en la que ha realizado trabajos por todo el mundo. Es, además, editor del blog infografistas, referencia absoluta en lo que a infografía se refiere. Aquí podéis consultar una selección que él nos ofrece de sus trabajos. El tema de su conferencia fue, evidentemente, la visualización de datos. 



Leí el clásico de Philip Meyer, 'Periodismo de precisión', a mediados de los 90 del siglo pasado (esto así suena a mucho tiempo, ya). Era parte de las lecturas de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense. Pero llevaba escrito ya más de 20 años, desde 1969-70. De manera resumida, Meyer teorizaba sobre la aplicación de técnicas de investigación social al periodismo: la estadística y las bases de datos, en concreto. Una especie de periodismo científico que manejase muchos datos y en el que la complicación era, y es, tener acceso a grandes bases de datos públicas con información sobre todos los ciudadanos, empresas, economía, etc., a lo que se añadía la enorme dificultad de que no había ordenadores, o más bien que comenzaban a existir entonces para los periodistas. Una vez obtenidos esos datos, se trataba de o bien ofrecérselos al público tal cual o, más interesante si cabe aún, cruzar esos datos para obtener resultados en muchos casos sorprendentes. ¿Cuántos de los muertos menores de determinada edad tenían seguro médico? ¿Y cuántos de ellos son de determinada raza? ¿En qué ciudades sucede más? ¿En qué barrio de tu ciudad?... Sorprendentes porque en muchas ocasiones los resultados obtenidos desafiaban, y desafían, lo que a primera vista sospechamos sobre la realidad.

La visualización de datos, tan de moda ahora, consiste en utilizar esos resultados (accediendo a bases de datos públicas o elaborando nosotros bases de datos más reducidas con determinadas informaciones que nos interesen, porque ahora los ordenadores nos permiten hacerlo de manera muy fácil) para presentarlos visualmente de la manera más eficaz con ayuda de las técnicas de la infografía. Así de sencillo (de describir, no hacer), aunque lo habitual es explicarlo con pseudotecnicismos, palabras complicadas, cuando no inventadas, y todo ello salpicado de anglicismos; es decir, no explicarlo. Lo típico de quien no sabe de qué está hablando o de quien quiere aparentar que sabe más de lo que sabe o, en todo caso, mucho más que quien le pueda leer o escuchar. Todo lo contrario a lo que hace el prestigioso periodista visual Alberto Cairo en esta magnífica entrada sobre la visualización de datos en el blog de El País en el que colabora hablando sobre el "periodismo con futuro".

Uno de los ejemplos que nos puso sobre los resultados sorprendentes de la visualización de datos es este gráfico interactivo que relaciona los presidentes de los clubes de fútbol con los negocios a los que se dedican. Está realizado en flash... pero en proceso de reconversión a HTML. (enlace al gráfico en su página web)


Chiqui Esteban nos mostró visualmente qué es la visualización de datos, organizando su conferencia en cuatro apartados sin un estricto orden, o más bien con un orden recurrente, en el que una vez llegado al último volvía al primero para ilustrar y profundizarlo aún más. Lo primero, para él, es explicar "de una manera distinta a como se explican las noticias con palabras. Una manera más directa y sencilla que cualquiera pueda entender". Después habla de contextualizar "poniendo en relación unos datos con otros"; descubrir, "porque a través de esas relaciones encontramos cosas que en muchos casos no habíamos sospechado", y, por último, sorprender. "Tenemos que hacer las cosas de una manera distinta a como las hacen las grandes cabeceras, que tienen muchos más medios".

¿Cómo hace todo esto este periodista visual? Pues creando en primer lugar una base de datos lo más completa posible en un sencillo documento de Google Docs, o en un documento de Excel. Una tablita en la que todos los que están autorizados a entrar —generalmente los infografistas y los redactores— van introduciendo datos. "De ahí, salen todas las historias". Después se crea una infografía —"antes utilizábamos Flash o Ilustrator"— y se programa para que esa infografía que presentará los datos se alimente de la base de datos conforme se actualiza con más información —"por eso ahora tenemos que utilizar código y usamos Dreamweaver o cualquier editor de código HTML, o Java... pero ¡no pongáis esa cara! Que no es tan difícil; que no, que yo soy un negao para los números y las matemáticas", nos dice entre risas. "El equipo de lainformación.com somos dos, que hemos involucrado a toda la redacción en esto", continúa. "Si no, sería imposible. Además, menos mal que nos hemos pasado al HTML porque el tráfico en tableta está creciendo muchísimo", y sabéis todos que los cacharritos móviles de Apple, iPads e iPhones, no admiten flash.



Chiqui Esteban explicando las características del gráfico que dejó preparado en lainformación.com para los Juegos Olímpicos y que se actualizó automáticamente (programado con HTML) con la introducción de datos por parte de los redactores en un sencillo documento de Google Docs. "Así, me pude ir de vacaciones", confesó


Tecnicismos aparte, para Chiqui Esteban lo más importante son dos cosas: ideas y planificación. "Yo he podido tomarme vacaciones, precisamente durante los Juegos Olímpicos", confiesa, "porque dejé varios gráficos programados de esta manera, y los redactores iban metiendo cada día los nuevos datos:  medallas, deportistas que ganaban, países... y el gráfico se actualizaba sólo".

Ideas, planificación... y, sobre todo, la información. Los datos. "Es menos importante hacer un gráfico bonito", repite Chiqui Esteban cargado de razón desde hace muchos años (en Salamanca nos puso una diapositiva de unas flores, creo, o de un gatito, como muestra de lo que les ofrecía a los redactores cuando le pedían una infografía "bonita"). "El periodismo de datos", por ejemplo, continúa Chiqui, "nos ha permitido saber que hay diputados que cobran ayuda por vivienda aunque vivan en Madrid. El año pasado se hicieron públicos datos sobre los diputados que después se han cruzado".

Ideas, planificación e información. "No hay que pensar en el gráfico, en cómo va a quedar, antes que en la información que se tiene. ES AL REVÉS", insiste. No se trata de "hacer un gráfico con globitos, que queda muy bien y están muy de moda, sin saber qué información tenemos". Porque posiblemente no sea la mejor manera de visualizarla y estemos ya condicionados. Es imposible saber cuál es la mejor manera de visualizar algo... si todavía no sabemos de qué algo estamos hablando, es de perogrullo.

Como "tampoco hay que dar interactividad porque sí, porque sea internet", va un poco más allá Chiqui Esteban. "Consume muchos más recursos de todo tipo, tiempo, de los servidores, de los ordenadores de quienes lo van a ver después... y lo mismo estamos hablando de información que no tiene por qué moverse, o dar saltitos. Hay que utilizar la interactividad con mucho criterio, midiéndolo mucho".

Chiqui Esteban durante el turno de preguntas... que fueron muchas e interesantes.

El turno de preguntas fue realmente muy participativo, con infinidad de cuestiones —alguna de ellas muy técnica sobre códigos y expresiones ininteligibles que el amigo Chiqui sorteó con una envidiable soltura— y la mayoría muy interesantes. Le planteamos la posibilidad de manipulación que puede existir, o no, con este 'nuevo' periodismo que se presenta aparentemente aséptico y científico... a lo que nos responde que "todo depende de la honestidad del periodista. Evidentemente, al elegir unos datos en vez de otros el resultado final puede quedar sesgado. Pero científico, claro que es". Como las estadísticas, claro... Por eso tiene de nuevo razón Chiqui al hablar de la "honestidad" de los periodistas, más necesaria que nunca en esta manera de informar en la que el lector puede estar en desventaja ante la "evidencia" de los datos.

Antes de finalizar tenemos que actualizar, eso sí, la tablita imaginada al comienzo. ¿Recordáis? Porque en el apartado de medios de comunicación en los que desempeñan su labor profesional hay que añadir ahora el que Chiqui Esteban ha sido fichado recientemente, nada más y nada menos, que por The Boston Globe. Por si cabía alguna duda sobre los resultados que la visualización de datos nos iban a ofrecer acerca de los periodistas visuales españoles... que en este caso el periodismo español 'pierde' —como tantos y tantos profesionales de muchísima calidad— mientras que en otros países sí valoran y contratan para intentar hacer mejores productos periodísticos. Enhorabuena y suerte, Chiqui.


Jornadas de Diseño de la URJC (I): 'Marca 360', José Juan Gámez
Jornadas de Diseño de la URJC (II): 'Una historia de la prensa deportiva española', Fermín Vílchez

lunes, 1 de octubre de 2012

USA Today today (2). Pantallas, ¿de papel?


Cada día que pasa estamos un día más cerca del futuro. Un futuro de pantallas que ya son el presente pero que mientras avanzan miran demasiado hacia el pasado, como esos corredores inseguros que vuelven la cabeza una y otra vez frenando así su esfuerzo... hasta llegar en ocasiones a perder la carrera. Sucede sobre todo en los grandes medios de comunicación, como este gigante USA Today que, no obstante, parece poner todo su empeño en los medios digitales y de ahí la pregunta del prestigioso diseñador periodístico Mario García sobre qué papel tendrá el papel del diario impreso en esta nueva etapa con la que terminábamos el artículo anterior.

Transformarse en una marca —y hay que señalar entonces que según declaraciones de Javier Errea durante su reciente participación en la Cumbre Mundial de Diseño en Prensa 2012, celebrada la semana pasada en México DF, la primera consecuencia de este rediseño integral ha sido, precisamente, que "han destruido una marca tradicional muy bien establecida; es un diseño fallido", tal y como tuiteaba desde allí el infografista Alberto Cairo— digital. Tener como objetivo, pues, convertirse en una marca de medios digitales:


La parte más destacada de su vídeo promocional corresponde, sin ninguna duda, a los medios digitales, tabletas y web, quedan el periódico en un muy segundo plano.

Como para saber a dónde vamos no está nunca de más echar, al menos, un pequeño vistazo a dónde venimos y en dónde estamos, tener perspectiva, enseguida recordé las sabias palabras del periodista, diseñador periodístico y ahora historiador del diseño periodístico Fermín Vílchez (es necesario volver a recordar y recomendar su monumental "Historia Gráfica de la prensa diaria española, 1758-1976", absoluta obra de referencia ya en el diseño periodístico español) en otra reciente conferencia a la que tuve la suerte de acudir en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, titulada precisamente "Presente y futuro del diseño periodístico". Su acertada tesis, compartida además por otros muchos autores y profesionales, es que en lo relativo al diseño periodístico, "los medios digitales miran demasiado al pasado, le deben todavía mucho al papel y no han desarrollado un lenguaje y un diseño propios, algo que tendrán que hacer. Falta creatividad, porque todos siguen pensando como se pensaba en el papel, y no hacen más que imitarse unos a otros".

Se cuestiona Vílchez si esto se debe en parte a condicionantes técnicos porque establece una inteligente comparación entre el actual estado de las webs periodísticas, absolutamente dependientes de informáticos con conocimientos muy especializados, y los primeros periódicos en los que los periodistas necesitaban a profesionales de las artes gráficas con muchos años de experiencia y formación.

Infinita 'home' de la página web de The New York Times, de ayer, 30 de septiembre de 2012.

"Todas las páginas webs de los grandes medios de comunicación parecen diseñadas exactamente igual", analiza Vílchez; "alguna pequeña diferencia tipográfica o de color, muy pequeñas, y luego las tres columnas de rigor; titular, texto y foto como en el papel...". Con el agravante añadido de que como no hay limitaciones de espacio —se acabó el viejo y recurrente problema de que no cabe todo en la portada, y todo lo queremos meter— pues las páginas 'home' se hacen larguísimas, interminables y "desaparece la valoración, la jerarquía, el orden informativo... todo parece meterse según va llegando, sin que prevalezca en muchas ocasiones el criterio periodístico de qué es más importante, qué queremos destacar, por qué apostamos". Además, "al ser todas prácticamente iguales, tampoco logran una seña de identidad con el diseño".




De los grandes medios... y de algunos menos grandes. Precisamente el último lanzamiento de un medio de comunicación digital en España, eldiario.es, dirigido por el conocido periodista Ignacio Escolar —que debe mucha de su bien ganada reputación a su actividad en internet desde hace años— es un claro ejemplo de diseño que mira más al pasado que al futuro, basado por completo en los diarios de papel que, curiosamente, su director declara con motivo de la salida de este su ¿nuevo? medio que "son como los vinilos". Claro que esta mediocridad visual —logo aparte, que me parece acertado e inteligente— también puede deberse a la falta de medios, o a lo que sería más alarmante aún, falta de interés por el diseño o, incluso peor todavía, desconocimiento de que el diseño periodístico es periodismo, y de que la calidad de los contenidos para ser completa requiere una calidad acorde en la forma. Que unos contenidos de calidad mal diseñados se empobrecen y pierden calidad. Que el valor añadido es en parte un diseño eficaz. Que un mensaje periodístico es forma y contenido... Con la sorpresa incorporada de que, además, hablamos de internet, donde los elementos visuales se multiplican ofreciendo posibilidades de diseño periodístico absolutamente desaprovechadas por parte de periodistas supuestamente expertos en internet.  Esperaremos, no obstante, para ver si evolucionan en lo relativo al diseño, y les damos eso sí una merecida enhorabuena por su salida, lo que no es nada fácil en estos tiempos, a la vez que les deseamos toda la suerte en su proyecto.





Si el rediseño del papel del USA Today, digámoslo de una vez, nos parece irrelevante —por muy "infografía viva" y guay que sea su círculo de colores que sube y baja, y se decora, y que suponemos que es uno de los motivos por los que el gran Errea hable de "cargarse su marca"—, en lo relativo a la página web, sin embargo, sí parecen dispuestos a ir un poco más allá que el resto de los grandes medios. Y nótese que hablo siempre, o casi siempre, de grandes medios, porque también coincido con Vílchez en que "el diseño periodístico digital más interesante está en algunos blogs y en medios pequeños" y alternativos. En algunos. Sobre el diseño para iPad del USA Today no tenemos más datos que los que ofrecen a través de su vídeo promocional, en el que parecen apostar mucho por la tableta, pero con un resultado que podríamos llamar, a muy superficial y primera vista, insisto, de "puesta al día". Lo interesante está en la web.

Y volvemos antes de entrar en la web otra vez la vista atrás, porque resulta curioso que los primeros periódicos se compusieran en lo que muchos autores han denominado "maqueta vertical", debido a la tecnología del momento. Según avanzaba esa tecnología de las artes gráficas en los diarios, se pudieron ir introduciendo elementos horizontales. En esos comienzos todo eran columnas, sólo columnas, e incluso los títulos estaban dentro de ellas sin la posibilidad de que abarcasen varias como hacemos ahora. Todo se componía de arriba a abajo. Curioso, porque posiblemente por motivos técnicos del todo distintos, también las páginas webs comenzaron siendo una infinita columna vertical a la que después se han ido añadiendo elementos horizontales.

Primer número del periódico barcelonés La Vanguardia, 7 de abril de 1894, donde se puede ver con toda claridad la denominada 'maquetación vertical' en la que todos los elementos, títulos incluidos, estaban en el interior de las columnas, sin la posiblidad de que, por motivos técnicos, ningún elemento ocupase más de una.

Cuando preparaba su mencionada conferencia, Fermín Vílchez me consultó a través del correo electrónico sobre si había condicionantes técnicos que obligasen a que todas las páginas webs informativas tuviesen tres columnas. Le dije que no, que tal vez existía el consenso no escrito de que es la mejor manera de dividir una pantalla. Pero a la vez le di mi opinión, que evidentemente no es ni novedosa ni exclusiva, de que la mejor manera de aprovechar una pantalla no es dividiéndola en columnas, como sí lo es en el papel, sino estableciendo bloques de manera horizontal, módulos horizontales.







Diversas posibilidades para organizar la información utilizando el mencionado 'diseño horizontal'. Con un tema principal (recuadro azul) y varios temas secundarios por debajo de distinas secciones (identificados por colores, utilizando a modo de ejemplo los del USA Today); desarrollando modularmente el tema principal de modo vertical; y con un único tema principal que puede, además, estar acompañado de subtemas para complementarlo.

¿Por qué? ¿Porque queda más bonito? NO. Porque queda más bonito NO. Sencillamente porque es más sencillo y directo. Se consigue mayor valoración, orden y se puede apostar de manera contundente por un número manejable de temas. O por tres, solamente. O dos. O uno. Son pantallas dentro de tu pantalla que, sin el infinito y frustrante 'scroll', te llevan al 'interior' de secciones que pueden organizarse de la misma manera, o llevarte directamente a artículos en los que sí habrá una columna de texto, una, o a una galería de imágenes, o a contenido multimedia... Sencillo y directo, funcional, como se exige que sea el diseño. Puede hacerse tan atractivo como el talento lo permita, seguramente más que con el modelo vertical, sobre todo para conseguir esa necesaria identidad visual con ayuda de estructuras inteligentes, la tipografía y el color.




Página principal ('home'), de apertura de sección ('Sports'), artículo con un vídeo y artículo sencillo de texto de la nueva web del USA Today.

Y es en esta dirección, precisamente, por la que parecen apostar en la nueva web del USA Today. Además, le añaden a los lados dos barras verticales con información económica útil a la izquierda y una más amplia a la derecha denominada "Right now" con actualizaciones de ultima hora, al minuto, y formato "tuitero". Se aprovecha el sistema identificativo de colores asociados a secciones del periódico (que no 'inventaron' en su diseño original del papel sino que tomaron posteriormente de diseños europeos, como bien nos recuerda Carlos Pérez de Rozas).

Las flechas situadas a izquierda y derecha de la página web del USA Today permiten navegar 'pasando' páginas a la manera de un iPad.

La característica más novedosa de su nueva página web es posiblemente la más discutible: esa navegación 'tabletera' con flechas a la izquierda y derecha para ir 'pasando' páginas a la manera de un iPad, ¿es necesaria en un ordenador? ¿Qué aporta? ¿Hay que 'imitar' a un iPad en un soporte que no es un iPad para tener éxito? La horizontalidad permite todo lo que hemos analizado anteriormente, pero no encuentro ninguna ventaja en este excesivo horizontalismo al que, además, habría que acostumbrarse. En la pantalla de un ordenador parece más coherente estructurar la información horizontalmente y navegar por ella hacia dentro, entrando en cada módulo y no desplazándonos hacia los lados como si estuviéramos en una pantalla táctil.

Claro que aunque hayan dado un importante paso tampoco se puede decir que sean revolucionarios entre los grandes medios en este tipo de estructuras horizontales (que ellos mismos y otros diseñadores asocian a las tabletas, pero que a mí me parecen el mejor sistema para cualquier pantalla, web incluida). Hace ya unos dos años existe una aplicación que hizo Google para The New York Times, que organiza con una estructura horizontal la página web del periódico —aunque, eso sí, como posibilidad opcional manteniendo su página web igual y no como este nuevo USA Today que se arriesga con su propuesta sin alternativas, apostando directamente por ella—, puede descargarse gratuitamente como un complemento para Chrome, y que hace exactamente esto:

 
 






También la última red social de éxito, Pinterest, es además de enteramente visual, horizontal:



Como horizontal es el diseño de la web de la empresa encargada del rediseño del USA Today del que estamos hablando, Wolff Olins, aunque con una estructura de 'aparente' caos de modernidad y dinamismo:



Hace 30 años, el USA Today arriesgó medios económicos y talento con una propuesta revolucionaria que cambió en mayor o menor medida a todos los periódicos del mundo. Ahora intentan adaptarse a los cambios que les llegan desde fuera y nos ofrecen algo que no es ni mucho menos lo que nos deslumbró cuando salieron al mercado en 1982. Nada nuevo, no es —tampoco lo esperábamos— ese nuevo modelo que todos buscamos, algunos aguardándolo sentados, posiblemente en vano porque lo más probable es que un mismo modelo para todos no exista, y cada uno tengamos que encontrar el nuestro.


USA Today today (1). El papel del papel

lunes, 26 de marzo de 2012

"La moda está de moda"
(XV Jornadas de Fotografía, Edición y Diseño del CEU)

Tenemos la sospecha de que hace ya quince largos años que han pasado en un brevísimo instante los entonces organizadores de las Jornadas de Fotografía, Edición y Diseño de la Universidad San Pablo CEU de Madrid, nuestros muy queridos Pedro Pérez Cuadrado y Laura González, no imaginaban que quince larguísimos años después transcurridos en un breve instante su iniciativa se iba a convertir en todo un clásico por el que pasarían los más importantes profesionales del diseño periodístico, la infografía y el fotoperiodismo. Los eventos, e incluso los estudios universitarios en relación al diseño periodístico eran prácticamente inexistentes entonces en Madrid, y en aquella privamera de 1986 participaron, atención, Mario Tascón, Javier Bauluz, Ricardo Curtis y Rodrigo Sánchez, entre otros... Así, hasta hoy, hasta la semana pasada. Por eso, una vez más, ¡enhorabuena al CEU y especialmente a Laura González (ahora al frente una vez que Pedro Pérez ha pasado a labores parecidas desde la Universidad Rey Juan Carlos del sur de Madrid)!, y, sobre todo, gracias. Por todo lo mencionado, y por contar desde hace tiempo también con nosotros.





Esta es la segunda edición dedicada al mundo de la moda (es muy oportuno recordar la espectacular producción en vivo que organizaron en 2008 con dos modelos, el gran fotógrafo Luis Malibrán y la reputada estilista Patricia Oliver), sector que resiste la crisis de la prensa mejor que la mayoría y por el que muchísimos alumnos de periodismo tienen un especial interés (las inscripciones superaron en mucho las plazas disponibles para estas jornadas y el salón de actos estaba a tope), porque, como muy bien dijo Laura González en la presentación, "la moda está de moda"



Luis Blasco (La moda en los períodicos versus la moda en las revistas)

Nuestro compañero de blog, periodista en la sección de diseño del diario El Mundo y profesor durante varios años de cursos de diseño periodístico en la Complutense, Luis Blasco, tuvo el honor de abrir estas Jornadas con una actualización de su conferencia en la que de manera muy ingeniosa y didáctica 'enfrenta' a periódicos y revistas.




Con numerosos ejemplos de distintas revistas (Esquire, Harpers Bazaar, Telva, Yo Dona) y páginas de la desaparecida sección 'Mujer en el Mundo' de nuestro periódico, su conferencia abordó las diferencias entre estructuras de páginas: rejillas modulares rígidas o flotantes, simetría frente a esquemas asimétricos o fragmentación; tipografía, con un análisis acertado sobre la identidad y jerarquía de la tipografía en los diarios frente a la experimentación y a cierta anarquía en las revistas; y el color, con un fin exclusivamente utilitario en la prensa diaria (identificación de secciones, "pocos colores pero muy bien utilizados", según Blasco), que en las revistas además de práctica se permite una vertiente puramente estética.




Para los diarios, la legibilidad "debe ser máxima, es una prioridad absoluta, mientras que las revistas se pueden permitir el lujo de sacrificar esa legibilidad para conseguir un mayor impacto visual o para crear determinados efectos", nos explicaba Luis Blasco cuando el flamante Mac decidió desobedecer sus órdenes para volverse loco con la cuidada presentación, unos breves momentos de pánico que solventó con sentido del humor: "Desde que ha muerto Jobs, esto ya no es lo mismo". Enseguida volvió a controlar la situación para señalar con imágenes las diferencias en lo que se refiere a la fotografía, informativa y rítmica en los diarios, estética y arrítmica en las revistas, según su análisis.








Las "revistas que quieren ser periódicos y los periódicos que quieren ser revistas" fueron el punto final de una conferencia que, antes, en esta actualización de "Periódicos versus revistas", nos presentó el caso práctico de la nueva sección de EM2 del diario El Mundo: numerosos ejemplos de páginas sobre la Pasarela Cibeles en distintas versiones del mismo material diseñadas para primera y segunda edición con las variantes que la actividad diaria de un periódico obliga a introducir: publicidades que entran sólo para una versión, material que de dos páginas pasa a ocupar una sola o al revés y que debe rediseñarse en un cortísimo espacio de tiempo... vicisitudes que la moda sólo padece en las páginas de un diario.


Natalia Bajo (La revista Telva del papel al iPad)

En apenas dos años Natalia Bajo ha pasado de diseñar en papel los contenidos de la que posiblemente es la revista de moda más importante de nuestro país a tener que llevar a cabo un proceso de reflexión ("pero reflexiona deprisa, me dijeron", nos contó Natalia, "porque en apenas dos meses salimos") para conseguir "meter" todos esos contenidos en la pantalla de un iPad; con contenidos multimedia añadidos y "no de cualquier manera, había que hacerlo con el nivel de excelencia que se le exige siempre a nuestra revista".


Y ha llegado hasta aquí, para desde aquí seguir experimentado hacia... porque, según su introducción histórica, desde el 2008 vivimos una crisis de publicidad, subidas del precio del papel, un cambio en los hábitos de lectura hacia lo digital e internet, donde aparecen nuevos competidores. "Vivimos una época de cambios a gran velocidad", comentó al auditorio, "que no es que vayan a llegar, es que ya han llegado y en los que todos estamos participando".

En 2009 se puso en marcha en Unidad Editorial el proyecto de Orbyt, un 'kiosko digital' que comenzó a comercializarse a partir de marzo de 2010. Natalia Bajo explicó que se creó entonces un departamento de producción multimedia para dar cobertura a las distintas publicaciones del grupo (El Mundo, Marca, Expansión, Telva, etc.) "y los periodistas tuvieron que comenzar también a pensar de una manera multimedia". En su revista, en Telva, se creó un equipo de trabajo ("una becaria y yo", nos confesó Natalia) para trasladarla al iPad y "según íbamos haciendo la revista se iba desarrollando el software para poder hacerlo". Buscaron modelos ("'Wired' fueron los primeros y es de lo mejor"), pero teniendo siempre presente que "no queríamos hacer en el iPad un Telva que no fuera Telva".




El proceso de trabajo de Telva para iPad comienza cuando ha terminado de hacerse la revista en papel. "Entonces tenemos unos 20 días para rediseñar todos esos contenidos para la nueva aplicación". El problema es que Telva "tiene muchas páginas, muchísimo contenido y no sólo gráfico, porque somos la revista que más texto tiene del sector", a lo que hay que añadir el contenido extra multimedia. Además, incluso a veces "podemos actualizar" alguno de esos contenidos si la actualidad lo exige. Natalia Bajo señaló que todavía no hay cultura en la publicidad para el iPad, no se ha desarrollado nada específicamente para este soporte a pesar de que ofrece infinitas posibilidades y terminó destacando algo que nos parece muy importante en su labor: "Reestructuramos la información, pero sin perder nunca de vista el sentido periodístico".


Clara Montagut ('Esquire', las claves de su diseño)

Ver nacer un medio siempre es un privilegio, y ver nacer la versión española de un medio como Esquire lo es mucho más. Por eso la conferencia de Clara Montagut (o Ladicash en su alter ego tuitero) tenía mucha miga: ver cómo la edición de Esquire se parece a la edición madre, la americana, pero sin ser una copia de la misma, con personalidad propia. Empezando porque la redacción, en sí misma, no tiene nada que ver. La española es pequeña, cabe toda en una mesa grande, lo que "influye de manera natural y hace la información accesible desde todos los niveles", nos contó Clara, pese a su patente cuasi afonía. Eso implica una frescura en los contenidos. Contenidos totalmente autoeditados. Del total de la revista el máximo de reportajes que vienen de la revista madre no sobrepasa el 8-10%. Y eso es mucho contenido propio.

Para conseguir todo eso, el diseño de esta revista se basa en cuatro pilares fundamentales: fotografía, tipografía, ilustración y humor.





La fotografía en Esquire es fundamental "porque la revista tiene una carga gráfica muy grande". "Queríamos hacer una revista distinta a lo que hay en el kiosco, con una gráfica atractiva y un gusto por la fotografía [...] que la gente conservara la revista." Como el contenido más pegado a la actualidad se escapa en las páginas de la revista, la fotografía tiene que intentar encontrar ese equilibrio entre actual e histórico, algo más vintage. Eso lo han conseguido con el retrato, tanto que ellos reconocen que han conseguido una especie de subgénero, el "retrato Esquire", un retrato sin artificio, identificado ya como un lenguaje propio. Y siempre en portada "porque la portada es la página más importante de una revista, y quien diga lo contrario miente", afirmó rotunda Clara. Y en Esquire usan la portada para vender una sola idea, nada de portadas sumario.





Al igual que con el retrato, en el resto de páginas busca que "los hombres se vean reflejados, que los modelos hagan cosas que se hacen en la realidad", y que la fotografía publicitaria no sea simplemente eso, publicitaria, sino darle un toque distinto, jugar con los objetos que se fotografían.

La tipografía es otro de los pilares de la revista, en el que Clara pone especial atención porque es "es como una ilustración". En la revista se buscan referencias a publicaciones de los años 50 y 60, la época dorada de Esquire con George Lois al mando, algo que puede parecer fácil pero que no lo es tanto si se tiene en cuenta que la revista se rediseña todos los años. Sí, todos los años. Para trabajar la tipografía de cada reportaje, confiesa Clara, necesita tener todo el material antes, tanto textos como fotografía, y a partir de ahí construir combinando familias. Siempre huyendo del uso de la tipografía de manera gratuita. "Cada texto tiene su tipografía".







En la ilustración, y la propia Clara es ilustradora, Esquire juega mucho con un estilo propio, vintage, algo que diferencia a la revista del resto. Al igual que con la enseñanza del paso a paso, evitando la fotografía aburrida, como por ejemplo a la hora de enseñar cómo se hacen unos abdominales.

El último pilar, y casi nos atreveríamos decir que el más importante porque abarca el resto, es el humor. "El tono de la revista es de un humor inteligente, queremos dar a la gráfica un tono de humor, contar a los personajes de otra manera". Al igual que hacen con el código de barras con sus moscas personalizadas, un guiño más a los hombres en su mejor momento, como reza siempre su portada.


Javier Moya (Del papel a internet)

A pesar de que Esquire lleva ya más de 50 números en nuestro país, su versión web sólo tiene un año. Esto es por la concepción de la web como un medio más, tal y como nos contó Javier Moya.

Según nos explicó el propio Javier, lo más complicado fue prever el comienzo, buscar la forma ideal de navegación en la web, las secciones, la salida de los artículos, etc. Querían cuidar "hasta el más mínimo detalle", no dejar nada al azar, como hacen en los pies de página. Por las peculiaridades de Esquire y Esquire.es decidieron que lo mejor era buscar una estructura de tres columnas, lo que les permitía evitar los molestos banners y popups de publicidad sin que los visitantes de la web dejaran de perder de vista los temas de portada y alguna dosis de publicidad menos invasiva.




Para ello es fundamental el equipo de diseño y desarrollo. "Nosotros dependemos más de ellos que ellos de nosotros", confesó Javier, muy contento con la navegabilidad que han conseguido gracias a la rejilla de tres columnas.

El uso de webfonts y de la tipografía integrada dentro de la fotografía es una de las señas de identidad de la web, lo que permite el juego de familias y cuerpos dentro de la misma. Para ello, insiste Javier, no hace falta tener muchos conocimientos técnicos, para eso están los técnicos.




Con estos elementos, además de, por ejemplo los dobles marcadores de páginas, las "miguitas de pan" que indican al lector dónde están, etc. intentan transmitir la misma sensación y mensajes que la revista de papel. A lo que hay que sumar la nueva experiencia que permite la red, como el uso de las redes sociales y la interacción con los lectores, fundamental para Javier como forma de enriquecer la propia web de una manera ágil y directa.

Además, hay que intentar trasladar los contenidos y juegos del papel a la web, cosa que no siempre se consigue aunque por lo menos se intenta. Para ello, como en el caso de la portada de Ferrán Adriá que olía a El Bulli, se puede recurrir a trucos como la ilustración que intenten evocar esa experiencia sensorial que sí ha conseguido el papel pero que todavía se le resiste a la red.



Pero lo más importante, según palabras de Javier, y que corroboró Clara, sentada a su lado, es "divertirse". Divertirse durante el trabajo permite hacer las cosas mejor, y si se puede hacer con los lectores, mucho mejor.