sábado, 5 de marzo de 2016

Jeff Jarvis y el futuro del periodismo

Llegaba Jeff Jarvis (1954) a la Universidad San Pablo CEU con el aura de gurú del que todos quieren oír cómo será el futuro de los medios. Pero nada más lejos de la realidad. El norteamericano confesaba, humilde, no saber cómo será ese futuro, aunque sí sabía quién lo protagonizaría: “Vosotros”, le dijo a los centenares de estudiantes que abarrotaban el Aula Magna. Serán ellos los que tengan que “construir” ese futuro. “Sois vosotros, los jóvenes, los que tengáis que reinventar lo viejo, yo ya estoy demasiado viejo para luchar”, ironizaba arrancando una sonrisa a su entregado audiencia.


Jeff Jarvis durante la charla en el CEU. Foto de Fernando Bonete Vizcaíno

Al igual que lo hizo Guttemberg, el primer emprendedor en esto de los medios, según Jarvis, son los jóvenes los que tengan que conseguir un producto nuevo, los que tengan que salir a la calle y preguntar “qué os hace falta, qué queréis, qué necesitáis”. Es esa búsqueda de las comunidades donde está el futuro del periodismo. Porque la función del periodismo, de los periodistas, es “servir a las comunidades, identificar un problema y ayudar a la comunidad a resolverlo". “Hay que añadir valor a la vida de la gente”, dijo. “No podemos pensar que basta con hacer un periódico”.



El auditorio del CEU. Foto de Fernando Bonete Vizcaíno

La época en la que la responsabilidad del medio terminaba cuando el receptor recibía el mensaje empaquetado ha terminado. “Con Internet todo ha cambiado”, sentenciaba Jarvis. “Estamos volviendo a la época pre Guttemberg”, donde el conocimiento se transmitía boca a boca, lo único que “ahora se transmite click a click”. “El público es lo valioso”, enfatizaba, y puso como ejemplo los podcast, que “nos enseñan a tener una relación directa con la comunidad”.

En esta situación es difícil diferenciarse en la maraña de medios, webs, radios, televisiones, etc. que hay en todo el mundo, pero Jarvis animaba a los estudiantes a agarrar “ese gran reto” y hacerlo suyo. A ser algo más que periodistas, a arriesgarse, a emprender, a terminar con el modelo de negocio actual de “copiarnos unos a otros infinitamente y desaprovechar un montón de talento”. “Hay un montón de nuevas oportunidades”, les animaba.

Google y Facebook

El profesor de la Universidad de Columbia, que se acercó a los alumnos para contestar a sus preguntas, criticó la actitud de los medios europeos respecto a Google y Facebook, inmersos en una absurda pelea que desde su punto de vista, americano 100%, no comprende. “Necesitamos estar ahí”, insistía el americano, que invitaba a los medios a reunirse con ambos gigantes tecnológicos para explicarles qué hacen, cómo lo hacen e intentar sacar el mayor provecho posible. Porque las vías de distribución han cambiado, para siempre. Y Google y Facebook son esas nuevas vías.

Eso, además, supone un cambio cultural. "Las masas, como tal, han desaparecido". Ahora somos individuos, y “Google y Facebook lo saben” y nos tratan como tal. "Mi periódico local no sabe dónde vivo, doónde trabajo, qué me gusta; Google y Facebook, que son empresas gigantes, sí". El trabajo es escuchar a esos individuos e identificar sus necesidades. “Necesitamos menos productos para las masas y más productos para los individuos”, recetaba Jarvis. “Google y Facebook nos pueden enseñar muchas cosas”.



Jeff Jarvis escucha atentamente una de las preguntas que le hicieron. Foto de Fernando Bonete Vizcaíno


Ese producto, además, es infinito, no se acaba nunca, se alimenta constantemente. “Hay que acabar con la idea de que vendemos un producto acabado”, decía Jarvis. La conversación sigue presente, “no pasa nada por reconocer que te has equivocado”, escucha a tu audiencia, alimenta la conversación. “Nuestra labor como periodistas es aportar valor a ese flujo, tenemos que volver al periodismo ‘slow”.

Ese periodismo slow que hace falta también necesita de un nuevo modelo de publicidad. “Ya no vale decir, ‘mira que auriculares más bonitos, cómpralos'. No, la publicidad ha cambiado, los periodistas tenemos que reinventar la publicidad porque los anunciantes no lo van hacer”. Ya no vendemos audiencias, posibilidades de que visualicen el producto miles de personas, “ahora vendemos habilidades, como la capacidad de hacer viral un contenido, la capacidad de crear comunidad”.


Y eso lo tienen que hacer los periodistas. No los robots, “que no sustituirán a los periodistas”. Tampoco los programadores, “porque los periodistas no tienen necesariamente que saber programar, pero sí tienen que saber hablar con el que programa”, conocer su lenguaje, saber qué te está diciendo.

Por eso Jarvis apuntaba a otro fundamento del periodismo del futuro, “el trabajo en equipo”, pequeños equipos de trabajo con variedad de perfiles para conseguir lo que para él es la clave de la cuestión: identificar una comunidad y resolver sus necesidades. Es decir, volver al periodismo.






Además del autor de libros como ‘Y Google ¿cómo lo haría?’ o ‘El fin de los medios de comunicación de masas’, también han participado Ana Ormaechea, periodista y alumna de Jarvis en la Universidad de Columbia, Luis Martín, Chief Digital Officer de Cope, Borja Bergareche, Chief Innovation Officer de Vocento, Jesús Moreno, Director de desarrollo de producto web de A3Media, Carlos Relloso, Chief Digital Transformation Officer de Prisa, Olalla Novoa, periodista de El Mundo, Anaïs Pérez, Head of Communcations de Google España, Consuelo Sánchez Vicente, Directora General de Comunicación del Ministerio de Presidencia y Pere Vila, director de Tecnología, Innovación y Sistemas de RTVE.

martes, 1 de marzo de 2016

5W

WHAT

Un nuevo proyecto periodístico, hecho por periodistas, a contracorriente de lo que consultores y cantamañanas del 'modelo de negocio' repiten sin saber de lo que hablan. Grandes reportajes sobre información internacional a los que se dedica el tiempo que necesitan, escritos por periodistas que saben de lo que escriben porque viven en los acontecimientos que narran y cuyos textos buscan la excelencia de la literatura, entendida ésta como una manera de contar el mundo. Fotoperiodismo de máxima calidad. Aquí no hay listas con las 10 paridas del momento, vídeos 'virales' con alguien que se da un golpe, titulares con la palabra "sexo" o la foto de una teta para buscar el clic fácil y rápido.


5W es una nueva revista que tiene como lema "crónicas de larga distancia" y eso lo explica todo. Lanzaron una web hace unos meses y un proyecto de crowfunding para conseguir 25.000 euros con los que publicar una revista impresa. Obtuvieron algo más del doble y la revista, ¿o es un libro?, ha salido hace muy poquito de las imprentas.


WHO

Xavier Aldecoa, corresponsal en África del diario La Vanguardia, entre otras muchas cosas; Mikel Ayestarán, periodista free-lance en Oriente Medio; Igor G. Barbero, periodista free-lance en el sudeste asiático; Maribel Izcue, corresponsal de la Agencia EFE durante años en Tokio y colaboradora de medios como El Periódico de Catalunya; Agus Morales, periodista free-lance y director de la revista, ¿o es un libro?, 5W; Pablo R. Suanzes, corresponsal en Bruselas del diario El Mundo, compañero y amigo, sí a veces sucede; Anna Surinyach, fotoperiodista y responsable de la edición gráfica; y Quim Zudaire, responsable de la web, son los miembros del 'Colectivo 5W'. En la revista colaboran, además, muchos más periodistas y fotoperiodistas de prestigio internacional.

De izquierda a derecha, Anna Surinyach, editora gráfica, Agus Morales, director, Pablo R. Suanzes, Carlos Alsina, Xavier Aldecoa y Martín Caparrós lanzándoles sus inteligentes provocaciones.


WHEN

Fue el sábado pasado, 27 de febrero de 2016. Estuvimos en la presentación de la revista que ha visto la luz tras más de cinco meses de trabajo, según nos contó su director. Suanzes y Carlos Alsina hicieron de maestros de ceremonias. Muy divertido. Muy ilustrativo. Especialmente divertido e ilustrativo estuvo Martín Caparrós, autor del fa-bu-lo-so texto que sirve como prólogo de la revista, ¿o es un libro?, titulado 'La guerra moderna'. “No hay que hacer lo que el público quiere", nos retó y sorprendió Martín, "hay que hacer periodismo CONTRA el público". O frases como ésta:



WHERE

En el salón de actos del colegio mayor Chaminade de Madrid. Lleno a rebosar, niños pequeños incluidos. Tuvimos la agradable sorpresa de encontrarnos allí con el gran Javier Errea, con quien comentamos las dudas que nos despierta el formato de la revista, ¿o es un libro? y que él comparte. Debate que también se produjo durante la propia presentación. Y es que si bien el tamaño tan pequeño y la tapa dura —como un libro— permiten llevarlo a cualquier sitio, en un bolsillo un poco amplio, facilita su conservación, y puede tener sentido si lo que se pretende es dar preponderancia a los textos, a pesar de que el tamaño de la letra es pequeñíiiiiiiisimo, la edición gráfica sale seriamente perjudicada, a pesar de que según su responsable Anna Surinyach, es algo por lo que apuestan de una manera decidida. Resulta algo contradictorio, porque es un formato que penaliza, y mucho, el magnífico fotoperiodismo que nos ofrecen. Suanzes me retó a que tendría que comerme mis palabras si logran vender los 5.000 ejemplares de este primer número anual, lo que demostraría según él lo idóneo del formato, y encantado acepté escribir un post si, como espero y confío y deseo, logran venderlos todos, admitiendo públicamente mi culpa.

Conexión en directo desde Beirut con Diego Ibarra, autor de la (¿polémica? no todos estaban de acuerdo en que fuera la más apropiada, o que se entendiera del todo) fotografía de la cubierta del primer número de la revista, ¿o es un libro?

Nos encontramos allí con nuestro compañero de redacción Alberto Rojas —un honor para nosotros diseñar páginas para sus crónicas—, que colabora en este primer número de 5W con un reportaje titulado 'Madres coraje en el limbo de los refugiados' que incluye textos y fotografías también suyas sobre seis campamentos de África.
Y también saludamos al terminar a Ramón Lobo, con quien trabajé hace ya... mucho, en el desaparecido diario El Sol: "Hay que resistir", nos dijo cuando comentábamos el degenerativo panorama de los medios impresos tradicionales. Y tiene razón, como casi siempre.

WHY

"Porque, a día de hoy, el papel es la única posibilidad de hacer rentable un proyecto periodístico. Sólo con una web no se puede vivir del periodismo de calidad. Necesitamos lectores, y lectores que paguen por nuestro trabajo", afirmó con rotundidad Pablo Rodríguez Suanzes —coincidimos con él palabra por palabra— en la presentación de este proyecto al que sólo podemos desear que funcione. Por ellos, por nosotros, y por una sociedad mejor, con más cultura y con el más que necesario periodismo de calidad. Amenazado más que nunca, hasta por los propios gestores de las empresas periodísticas de nuestro país.

miércoles, 24 de febrero de 2016

XIX Jornadas de Diseño del CEU

Cartel de las jornadas de diseño del CEU


Falta menos de una semana para que llegue el mes de marzo, mes de entrada de la primavera y de las Jornadas de Fotografía, Edición y Diseño que cada año celebra el CEU por estas fechas. Y ya van 19 ediciones.

La principal novedad de este año es que las jornadas se concentran en un sólo día, el 17 de marzo, en dos sesiones, una de mañana y otra de tarde. 

Durante la sesión de mañana (las jornadas empiezan a las 10.00h) participarán Rafel Höhr, director de Infografía de Prodigioso Volcán, Álvaro Varona, Diseño y Comunicación en SM y creador del blog de Apps infantiles GeneraciónApps, y Pablo Errea, de Errea Comunicación.

Por la tarde será el turno de dos fotógrafos, Bernardo Pérez, de El País, y Manuel Charlón, fotógrafo de viajes que nos hablarán del fotoperiodismo en los nuevos medios y del reportaje de viajes respectivamente. 

Un año más os invitamos a que no os perdáis estas ya clásicas Jornadas de Diseño que organiza Laura González y su equipo en la Universidad San Pablo CEU. 

lunes, 15 de febrero de 2016

Firmas en caja alta: Rodrigo Sánchez

Este pasado fin de semana se ha celebrado en Siracusa (Nueva York, EEUU) la elección de los ganadores de la 37 edición de los premios SND a los periódicos mejor diseñados del planeta. Pronto sabremos qué periódico será elegido como el mejor diseñado en 2016, galardón que recibirá durante la celebración del congreso de la SND que tendrá lugar en San Francisco los días 7, 8 y 9 de Abril. Durante esos tres días se reúnen en California los mejores diseñadores de prensa del mundo en los que dan su punto de vista sobre la profesión. Este año, además, contará con dos españoles, Alberto Cairo y el Director de Arte de El Mundo Rodrigo Sánchez.

La SND publica una entrevista en inglés con el reconocido Director de Arte de El Mundo y las revistas de Unidad Editorial y que nosotros recogemos en castellano aquí, bajo nuestra sección Firmas En Caja Alta, donde los más destacados profesionales del diseño periodístico, y el periodismo en general, dan su punto de vista.



Rodrigo Sánchez ha pasado la mayor parte de su vida profesional rodeado de periódicos y revistas, donde se siente como pez en el agua. Inició su andadura en el mundo de la prensa en ABC. Poco tiempo después pasó al diario económico Cinco Días, que dio pasó a la revista Cambio16 y de ahí a la revista Mercado. En 1990 desembarca en el madrileño Diario El Sol como Jefe de Diseño del Dominical y de los Suplementos. Con el cierre del rotativo en 1992 pasa a formar parte de Unidad Editorial como Director de Arte de sus revistas (Magazine, La Luna, La luna de Metrópoli, etc.) donde ha cosechado innumerables premios por el diseño de sus portadas. En enero de 2014 es nombrado Director de Arte de todo Unidad Editorial, tomando bajo su mando el diseño del periódico El Mundo. Ese mismo año recibe de la Society of News Design (SND) un premio por toda su trayectoria.

¿Cómo ha cambiado tu vida profesional desde que te convertiste en Director de Arte de El Mundo en lugar de sólo sus revistas?

El trabajo se ha multiplicado por 10. Antes llevaba la dirección artística de una docena de publicaciones, algunas semanales, otras mensuales, alguna anual e, incluso, una diaria (un periódico de información médica). Ahora, a todo eso, hay que sumar un diario de tirada nacional y todos sus suplementos semanales y mensuales. Ya no es posible mimar personalmente cada página como antes. Tengo que centrarme en páginas especiales o en proyectos ambiciosos. Por eso es fundamental inculcar al equipo la esencia del diseño, de mi diseño, y las bases de un trabajo bien hecho; cuáles son los mínimos que nos auto exigimos y cuál es nuestra meta de excelencia. Hacer que el periodista diseñador pierda el miedo a la página en blanco y que trate de pensar cada página cada vez, cada día. No hay dos temas iguales, no debería haber dos páginas iguales. Cada tema, cada noticia, cada exclusiva, merece ser tratada de una manera exquisita y singular.


Es cierto que el trabajo se ha multiplicado por diez, pero también se han multiplicado por 10 las oportunidades de hacer páginas interesantes. Cada día es un reto, cada día es una oportunidad. Frente a la serialización de las páginas hemos de ofrecer artesanía periodística. Especialización y diferenciación frente a monotonía y plantillas prediseñadas. Todo se puede hacer, todo se puede cambiar. Solo hace falta rigor y gusto, sensatez e imaginación. Y, por supuesto, mucho trabajo, mucho esfuerzo. Hay que estar en la redacción, hay que estar pendiente y dispuesto a cambiar ideas y modelos sobre la marcha. Desde primera hasta última hora, desde primera a última página. La interacción permanente con los redactores y con los responsables de redacción enriquece el producto final.



Todo periódico tiene en su interior nichos de información donde es posible experimentar gráficamente. La ubicación de los bloques gráficos y tipográficos, la relación entre ellos y su secuencia en el espacio modifican la percepción que el lector tiene de la noticia. Tenemos que trabajar el periódico como si se tratase de una película hecha con cortometrajes, con muchas historias individualizadas pero que todas ellas cuentan la historia de un día. Un día concreto, irrepetible, como el periódico de ese día. El periódico ha de tener dosis permanentes de sorpresa. Una equilibrada mezcla de audacia creativa y rigor informativo. En definitiva, ser capaces de hacer un producto coherente pero que sepa articular y armonizar los diferentes ritmos, las velocidades, que deben coexistir en un diario.

Delicatessen impreso frente a la noticia rápida, una joya diaria para mimar a nuestros mejores y más fieles lectores. Que estén orgullosos de llevarnos bajo el brazo.

Has ganado un premio a tu trayectoria por tus divertidas, inteligentes y bonitas portadas de Metrópoli. También has ganado grandes premios por la narrativa de noticias en las páginas de El Mundo, en particular por el enfoque visual del aniversario de los atentados del 11-M en Madrid. ¿Cómo es tu dirección de arte en este tipo de noticias, tan diferente al entretenimiento y estilo de vida de las revistas?

Metrópoli ha sido, y es, un gran banco de experimentos. En general, las revistas en las he trabajado lo son. Podría decir que he estado casi treinta años entrenándome para este momento. Ahora puedo tratar la información diaria con el respeto y la dedicación que se trata a los reportajes semanales o mensuales. Es como tener un “metrópoli” cada día. Cada página es una portada. La oportunidad de hacer magia con noticias de actualidad, con fotografías de actualidad y, a veces, sacar jugo al hecho de no tener nada: ilustrar solo con tipografía. La noticia se ilustra a ella misma.



No es muy diferente explicar gráficamente un suceso o una catástrofe natural a contar la sinopsis de una película de cine negro o policíaco; o una entrevista a una portada de revista dedicada a un protagonista de una superproducción de Hollywood. Todo son historias en las que hay personas involucradas. Y todas esas historias que hay que explicarlas a los lectores. Las unas son de ficción, estas son reales. Pero todo son historias. Nosotros vivimos de contar esas historias.

¿Cuánto tiempo puedes seguir invirtiendo en Metrópoli?

El mismo de antes. Saco tiempo de donde puedo y, si es necesario, de mi tiempo libre. Sigo considerando a Metrópoli como un regalo de Dios, un juguete, una afición más que un trabajo. Es una bendición poder usar ese espacio cada semana y contar con algunos de los mejores profesionales del mundo que están deseando publicar en ese trozo de papel. Envidiaría a cualquier profesional que tuviese la oportunidad de hacer esas portadas semana tras semana…y ya va para más de veinte años.



“Escoge un trabajo que te guste, y nunca tendrás que trabajar ni un sólo día de tu vida.” Confucio

¿Qué rol tiene el trabajo en el área digital dentro de tu jornada habitual? ¿Inviertes mucho tiempo el en el área digital, y en caso afirmativo, en qué tipo de trabajo?

El diseño digital, de momento, no me ocupa un porcentaje de tiempo muy alto. Creo que es un mundo que ofrece un campo enorme de posibilidades pero adolece de poco rigor tipográfico, escaso control de la ubicación exacta de elementos informativos y exceso de publicidad, mucha de ella invasiva. Si a eso sumamos que, además, su diseño externo e interno ha de servir para múltiples soportes digitales (responsive), el reto es aún mayor.



El problema, común en todas las webs, es que su diseño sigue dominado por técnicos e ingenieros sin conocimientos informativos y con casi nulas nociones de tipografía o edición fotográfica. Lamentablemente el diseño digital convencional (webs de diarios) está a años luz del diseño editorial impreso. Falta de jerarquía, falta de precisión gráfica y de relación entre noticias. Funcionan más como un almacén de noticias que como un producto informativo elaborado profesionalmente. Siempre existe una justificación técnica para poder decir que no es posible hacer tal o cual cosa.

Hay un rechazo casi físico a que los diseñadores de prensa intervengamos en la creación y desarrollo, en la traslación de la información de papel a web. Son dos soportes diferentes, dos contenedores diferentes pero trabajan con el mismo contenido: la información.


Los códigos, el lenguaje, el método, los envoltorios, deben estar siempre en manos de diseñadores no de técnicos. La labor de estos, fundamental, es dar soluciones a los retos estéticos e informativos que les planteemos desde las redacciones.

Con una web no eres capaz de hacer la “fotografía” de un día; las historias antiguas se mezclan con las recientes, los géneros se entremezclan, las secciones se confunden. Es un periodismo urgente, descolocado. Se leen noticias aisladas, no medios en conjunto. La capacidad de relacionar historias se pierde. Así como la jerarquización de las noticias. El diseño informativo desaparece. La portada como tal deja de tener sentido.

Es un consumo de noticias “crudas”, pues se llega a la noticia directamente a través de enlaces de redes sociales; noticias descontextualizadas del resto, con la edición justa y sin cuidado por el detalle.

La noticia sin su empaquetado profesional se convierte en “materia prima”, vuelve al origen y se deja en el camino muchas décadas de enriquecimiento, de edición gráfica, de valoración.

Como Director de Arte, parte de tu trabajo es la excelencia, motivación y creatividad de otros. ¿Cómo mantienes tu propia motivación y creatividad en niveles tan altos?

Hay que contagiar la emoción por el trabajo al equipo. Todos han de sentirse parte del producto, coautores, partícipes del éxito. Y, también, hay que ser generosos con los errores, pues es parte del aprendizaje. La parte más difícil es hacer cambiar de mentalidad. Hacerles ver y creer, sobre todo, que es posible hacer las cosas de otra manera. Que hay que saber manejar los principios básicos de la maquetación para poder hacer diseño editorial de altísimo nivel.



Tenemos que crear reglas muy estrictas: formatos rígidos para cualquier tipo de contingencia, con todas las posibilidades contempladas y sus correspondientes soluciones gráficas sistematizadas. Luego, esas estrictas e inquebrantables reglas, hay que tirarlas a la basura y reinventarlas cada día.

La creatividad mejora con el uso. La práctica continua mejora los resortes para relacionar problemas y soluciones y, con ello, muchos recursos surgen casi espontáneamente. La creatividad nunca decae, sino que mejora con el tiempo. Y, además, es contagiosa. El equipo se empapa y se esfuerza en conseguir soluciones ingeniosas a asuntos banales.

miércoles, 10 de febrero de 2016

Periodiquería móvil

No había una mejor manera de retornar a esta serie tan entrañable para nosotros, como son las 'Periodiquerías', con una de las mejores de todas las que hemos publicado, y no son pocas precisamente (echad un vistazo a los enlaces del final del artículo... pero con tiempo). Por si fuera poco, el autor es ni más ni menos que Ramón Salaverría, alguien muy querido por este blog y, sobre todo, admirado en su faceta de profesor y estudioso de la comunicación y el periodismo. Si de verdad están interesados en los periódicos, o en el periodismo en general, lean lo que escribe este profesor de la Universidad de Navarra, especialista en nuevas narrativas y todo lo relativo a internet y el periodismo. Síganle en las redes, vayan a alguna conferencia suya si tienen oportunidad de hacerlo... y luego nos cuentan.

Esta imagen es la de una curiosísima periodiquería móvil. O lo hacía desde siempre, o bien ahora que los quioscos están desapareciendo, este vendedor de prensa ha tenido la feliz idea de recorrer todos los días el valle de Baztán, en Navarra, con su furgoneta llena de periódicos. Llega a cada uno de los pueblos, toca la bocina tres veces y... ¡a vender periódicos! Es fabuloso. Como lo es que Ramón, que nos cuenta haberle visto faenando en varios lugares del valle, lo encontrara en el pueblo de Oitz para poder tomar esta soberbia imagen que ocupa desde hoy un lugar privilegiado entre cientos de periodiquerías de todos los continentes del mundo. Gracias, amigo.

Oitz, valle de Baztán, Navarra (España, 2016) / Ramón Salaverría






Entregas anteriores de Periodiquerías:


Periodiquerías (I): Madrid - Nueva York - Sevilla
Periodiquerías (II): Bilbao - Resistencia (Chaco-Argentina) - Múnich
Periodiquerías (III): Estambul - Praga - Nueva York
Periodiquerías (IV): Salamanca - Edimburgo - Tres Cantos (Madrid-España)
Periodiquerías (V): Lima - Bruselas - Mérida (España)
Periodiquerías (VI): Londres - París - Roma
Periodiquerías (VII): Las Vegas - Los Cristianos (Tenerife) - Alicante
Periodiquerías (VIII): Antigua (Guatemala)
Periodiquerías (IX): Berlín - Viena - Moscú
Periodiquerías (X): San Francisco - Puerto de Santa María (Cádiz) - Málaga - Newspaperman
Periodiquerías (XI): Lisboa
Periodiquerías (XII): Venecia - San Petersburgo - Osaka
Periodiquerías (XIII): Barcelona - Los Angeles - Buenos Aires
Periodiquerías (XIV): Kabale (Uganda) - Honolulu (Hawai) - Filadelfia
Periodiquerías (XV): Zaragoza - Gerona - Pamplona
Periodiquerías (XVI): Miami - Nueva Delhi - Lima
Periodiquerías (XVII): Hollywood (Los Ángeles - USA)
Periodiquerías (XVIII): Cagliari (Cerdeña - Italia) - São Paulo - Parlamento Europeo (Bruselas)
Periodiquerías (XIX): México DF - Salzburgo - Buenos Aires
Periodiquerías (XX): Milán - Punta Arenas (Chile) - Cannes
Periodiquerías (XXI): Londres
Periodiquerías (XXII): Xian (China) - Assilah (Marruecos) - Bergen (Noruega)
Periodiquerías (XXIII): Damasco - Washington - Turku (Finlandia) - ¿Monumento al lector de prensa? Tampere (Finlandia)
Periodiquerías (XXIV): El Vaticano - St. Ives (Reino Unido) - Harvard (Estados Unidos)
Periodiquerías (XXV): Denia (España) - Seúl - Nápoles
Periodiquería de la Paz (XXVI): Pekín
Periodiquerías (XXVII): Como (Italia) - Oporto - Plasencia (España)
Periodiquerías (XXVIII): Pretoria (Sudáfrica) - Manchester - Aeropuerto de Heathrow (Reino Unido)
Periodiquerías (XXIX): Guayaquil - Valladolid - Avilés
Periodiquerías (XXX): La Habana - Aeropuerto de Ezeiza (Argentina) - Getafe
Periodiquerías (XXXI): Algeciras - Zamora - Gijón
Periodiquerías (XXXII): Melbourne - Ágreda (Soria) - Oviedo
Periodiquerías (XXXIII): Maranello (Italia) - Llanes (España) - Antigua Venta de Almadrones (Km. 103 de la Autovía A-2 Madrid-Barcelona, España)
Periodiquerías (XXXIV): Oslo - Huesca - Ribadesella (España)
Periodiquería del 15-M: Periodiquería 15-M (Puerta del Sol, Madrid, España)
Periodiquerías (XXXV): Atenas - Puerto de Mazarrón (España) - Aínsa (España)
Periodiquerías (XXXVI): Béjar (España) - Valencia - Jávea (España)
Periodiquerías (XXXVII): Montegordo (Portugal)
Periodiquerías (XXXVIII): Florencia - Split (Croacia) - Kaunas (Lituania)
Periodiquerías (XXXIX): Penang (Malasia) - Liverpool - Cancún
Periodiquerías (XL): Volterra (Italia) - Son Bou (Menorca) - 'El Molino' (Albacete)
Periodiquerías (XLI): Rovinj (Croacia) - Sanlúcar de Barrameda (España) - San Juan de Alicante (España)
Periodiquerías (XLII): Teherán - Bolonia - Monza (Italia)
Periodiquerías (XLIII): Santiago de Compostela (España)
Periodiquerías (XLIV): Pola de Laviana (España) - Pisa (Italia) - Pula (Croacia)
Periodiquerías (XLV): Rangún (Birmania) - Soria - Coca (España)
Periodiquerías (XLVI): Varsovia - Praia (Cabo Verde) - Copacabana (Río de Janeiro
Periodiquerías (XLVII): Chichén Itzá (México) - Cuzco - Vitoria-Gasteiz
Periodiquerías (XLVIII): Turín - São Paulo - Arequipa (Perú)
Periodiquería especial Huracán 'Sandy' (XLIX): Nueva York.
Periodiquerías (L): Valladolid (Yucatán, México) - Montevideo - Santander
Periodiquerías (LI): Taipei (Taiwán) - Colonia (Uruguay) - Viena
Periodiquerías (LII): Auckland (Nueva Zelanda) - Sigüenza (España) - Orozko (España)
Periodiquerías (LIII): Córdoba (España) - Lugo - San Vicente de la Barquera (España)
Periodiquerías (LIV): Especial Buenos Aires.
Periodiquerías (LV): Hoi An (Vietnam) - Marrakech (Marruecos) - Sidney
Periodiquerías (LVI): San Lorenzo de El Escorial (España) - La Granja de San Ildefonso (España) - Benaske (España)
Periodiquería (LVII): Especial #BostonMarathon
Periodiquerías (LVIII): León - Tokyo - San José (Costa Rica)
Periodiquerías (LIX): Dublín - Niza - Baeza (España)
Periodiquerías (LX): Pinar del Río y Colón (Cuba)
Periodiquerías (LXI): Tetuán (Marruecos), Isla Canela, Cangas del Narcea
Periodiquerías (LXII): Especial Perú

lunes, 1 de febrero de 2016

Via Solferino, 28

En el número 28 de la Via Solferino de Milán hay un templo del periodismo. Algunos dicen que es un museo, pero para mí es un templo. Del periodismo y de la cultura. Un templo y un símbolo de la propia Italia que los periodistas que tienen el honor de trabajar en él defienden a brazo partido ante el imparable avance de los bárbaros financieros, contándonos con orgullo en sus pasillos que "ni los fascistas pudieron ocupar este sitio en los años 30 del siglo pasado".

En las paredes de este imponente edificio centenario hay colgadas fotografías en blanco y negro con los más destacados escritores, intelectuales de cualquier disciplina y periodistas que han escrito en las páginas del periódico que tiene su sede allí, así como de todos sus directores. Casi no queda pared libre después de más de 140 años de excelencia y los retratos suben y bajan también por los muros de las escaleras principales. Leonardo Sciascia, Alberto Moravia, Rafael Alberti, Indro Montanelli...

Estuvimos allí, nos habían hablado del lugar y queríamos desde hace mucho tiempo visitarlo. Caminamos rodeados de amabilidad y hospitalidad por esos pasillos y por las distintas dependencias en las que están las secciones del periódico porque, al contrario de lo que sucede en España o en las redacciones de la prensa anglosajona que hemos visto en tantas películas, no hay una sala diáfana grande en la que se agrupe toda la redacción. Entramos a la mítica sala de reuniones donde se decide lo que se publica cada día en primera página y estuvimos paseando después por la fría noche de Milán con el alma encogida.

En el número 28 de la Via Solferino de Milán está la sede del Corriere della Sera.


Puerta principal del Corriere della Sera en Via Solferino, 28, Milán

Patio interior


Escalera principal y pasillo de la planta superior en el que están los despachos del director y la sala de reuniones, con retratos de los más destacados escritores y periodistas que han publicado en las páginas del diario


Leonardo Sciascia, Alberto Moravia, Pier Paolo Pasolini.

Indro Montanelli, histórico director y uno de los periodistas más prestigiosos de todos los tiempos y lugares.

Sección de la página web del diario.


Dos imágenes de la sección de Diseño, donde se confeccionan las páginas.


La mítica sala de reuniones.

Sala que alberga la sección de Economía.


Via Solferino, 28, Milán. Corriere della Sera

viernes, 15 de enero de 2016

Acabar a lo grande








Esta es la cobertura que realizó nuestro periódico el lunes sobre la muerte de David Bowie: Los ojos 'bicolores' del genio británico del Pop mirándonos por encima de la cabecera de la portada, obra del gran Ulises Culebro. Una fabulosa ilustración de Ricardo Martínez, para quien se nos acaban ya los calificativos, abriendo la sección de Cultura (ilustración que, por cierto, y a pesar de su increíble complejidad técnica y tamaño, se tuvo que realizar en un tiempo récord por una de esas historias que no se pueden contar por formar parte de lo que puede denominarse "lo que pasa en el vestuario..."). Una primera página doble con la crónica de Darío Prieto y una opinión de Loquillo. Otra segunda página doble con opiniones de Tomás Fdo. Flores, Javier Menéndez Flores y Julián Ruiz. Otra tercera página doble con informaciones de José Manuel Gómez, la relación de Bowie en el cine escrita por el siempre brillantísimo Luis Martínez y con la moda, en un análisis de Leticia Blanco. Un friso en la parte superior de todas estas seis páginas con un completo trabajo de edición sobre la discografía de Bowie. Y, finalmente, otra página con un obituario escrito por Pablo Gil, especialista en música.

Posiblemente, la manera más apropiada para contar el final a lo grande que ha tenido de uno de los grandes. Porque no se puede morir de una manera más genial que ésta:




No tengo los datos, no quiero siquiera preguntar por ellos, pero me temo que todo este despliegue de talento en contenidos, diseño, edición... calidad periodística en suma, no ha supuesto que vendiéramos el martes un sólo periódico más. Posiblemente sucediera todo lo contrario, porque si la tendencia es que la difusión de los periódicos impresos sigue y seguirá cayendo, entonces este martes habremos vendido menos periódicos que el lunes, día en el que a su vez se habrán vendido menos que el domingo... Lo propio de una sociedad que ha decidido prescindir de un bien público informativo y cultural que hasta ahora la enriquecía. Una sociedad que decide empobrecerse día a día. Y es que ¿alguien puede señalarnos una cobertura sobre la muerte de David Bowie de una excelencia similar a ésta que os mostramos hoy realizada en una página web? ¿Algo que dentro de un tiempo pudiera recordarse?