Teníamos razón. Lo sabíamos, estábamos convencidos que todas nuestras charlas, que todo nuestro predicar en el desierto, que todas nuestras fervorosas discusiones se verían recompesadas. ¡¡¡Tenemos razón!!!. Y el Guggenheim de Nueva York tiene la prueba definitiva: no colocamos las cosas para que queden bonitas (que también); las colocamos porque tienen un sentido y transmiten un mensaje. Estamos casi emocionados...
Hasta Nueva York hemos mandado a nuestro enviado especial, Javier Gallego (amigo y experto en Bolsa de El Mundo) para que nos traiga la prueba definitiva, el Santo Grial de nuestra lucha. En la jungla de asfalto, junto a Central Park, Javier entró en el Guggenheim, y entre sus circulares paredes encontró la respuesta a nuestras plegarias.
Sarah Charlesworth tiene la culpa. Durante un mes, allá por finales de los 70, esta artista se dedicó a borrar todo el texto de las portadas de varios periódicos (excepto la cabecera) para demostrar cómo puede cambiar el mensaje según se coloquen las fotos, que la edición visual también es información. Y para demostrar, también, que el texto, o la ausencia del mismo, transmite un mensaje.
Emocionados os mostramos estas fotos y le damos las gracias a Javi por descubrir, aunque sea al otro lado del Atlántico, que teníamos razón... Fondo y forma son inseparables si queremos transmitir un mensaje completo.
1 comentario:
muy bueno el blog
saludos
http://www.estudiocromatic.com.ar
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