miércoles, 10 de diciembre de 2008

El mito de la maqueta sin cambios

Parte del trabajo habitual del departamento de Diseño de un periódico consiste en premaquetar, que es, ni más ni menos, que dejar las maquetas preparadas para un tema que no va a salir al día siguiente, sino que saldrá dentro de unos días, pero que hay que dejar listo porque la gente "libra este fin de semana" o alguna excusa parecida. Es un poco como hacer futurología, porque todo lo que tú habías planeado cambiará con una probabilidad del 99%, dejando el 1% restante en manos de la diosa Fortuna. Es decir, es más probable que te toque el gordo de Navidad a que esa(s) página(s) que habías maquetado no sufra(n) ningún tipo de cambio.

El otro día creíamos haber encontrado ese 1% tan ansiado, ese mito del que todos habíamos oído hablar pero que nadie había visto con sus propios ojos. Fue el pasado jueves. Fernando, nuestro compañero y amigo, premaquetó un tema de redes sociales con Manolo de Miguel, jefe de maquetación e Isabel Longhi, jefa de la sección de Comunicación del periódico. La (pre) maqueta resultante fue la siguiente:


En el hueco en blanco tendríamos que encajar un dibujo que el magnífico dibujante Raúl Arias nos mandaría el viernes a última hora para así poder dejar cerrada la página del domingo, día en que saldría publicado el tema.

Dibujo que mandó Raúl Arias

Pero una vez introducido el dibujo en la maqueta, y aunque nos la prometíamos muy felices... la realidad se impuso y nos dimos cuenta que el dibujo era, cuanto menos, desproporcionado respecto a toda la página.

Tras este primer "shock", decidimos cambiar la página, pero claro, los textos estaban cerrados y teníamos que respetar al máximo los mismos. Por lo tanto no podríamos añadir nada det exto, la opción más factible, ya que al reducir el tamaño del elemento gráfico tendríamos que aumentar el del texto.

Solución: tocar la página y añadir/restar/modificar elementos para que el dibujo quedara un poco más discreto. Cambiamos la ubicación y tamaño de la ilustración, el texto de la segunda página lo dejamos en dos columnas y le añadimos una foto engatillada y los pantallazos que iban a una columna los modificamos y trasladamos a la ubicación que más nos convino. Lo único que respetamos fue el título a cinco columnas y la columna de opinión de salida. Este es el resultado final, "igual" que lo que habíamos premaquetado.


P.D. Todavía hubo un último cambio. La foto de Paris Hilton en un principio mostraba a Mark Zuckerberg, creador de facebook, pero la archiconocida y polémica heredera se cólo a última hora en la que iba a ser una página sin cambios.

1 comentario:

uminuscula dijo...

cojonuda narración, blasquet